Xtep ha culminado la emisión de bonos que anunció hace dos meses. La compañía, dedicada a la fabricación y distribución de artículos deportivos, ha colocado bonos convertibles que han sido comprados en su totalidad por Hillhouse Capital en dos tramos por 109,2 millones de euros.
Por un lado, ha emitido deuda por 500 millones de dólares hongkoneses (54,3 millones de euros). Por otro lado, ha colocado bonos convertibles por 65 millones de dólares (54,9 millones de euros) a través de Xtep Global, una filial controlada al 100% por el grupo chino. La idea es destinar estos recursos a financiar el desarrollo internacional de Palladium y K-Swiss, según ha indicado Xtep en un comunicado. Todo ello después de un año en el que solo las marcas internacionales aguantaron el tipo en China, lo que permitió a la compañía que su cifra de negocio sólo cayera un 7,9% en 2020, hasta 7.101 millones de yuanes (916 millones de euros), primera vez en más de una década que contrae las ventas.
La facturación de K-Swiss y Palladium, dos marcas especializadas en el segmento del athleisure, aumentó un 12,2% interanual, hasta 999 millones de yuanes (129 millones de euros). Merrell y Saucony, cuyo negocio gestiona en China gracias a la joint venture firmada con Wolverine, dispararon sus ingresos un 600%, aunque no copan ni el 1% de las ventas totales, con 73,5 millones de yuanes (9,5 millones de euros). El grupo chino prevé facturar 20.000 millones de yuanes chinos (2.616,6 millones de euros) en 2025, con una tasa de crecimiento anual compuesto (cagr) de más del 23%.