Under Armour también apuesta por la concentración de su red de distribución. La compañía estadounidense de artículos deportivos quiere estar presente solo en 10.000 tiendas en Norteamérica a partir de 2022.
La estrategia comenzará durante los próximos meses, cuando la marca desaparecerá de entre 2.000 y 3.000 comercios en la región, según ha indicado Patrick Frisk, consejero delegado de Under Armour en la última presentación de resultados. “Quiero ser muy claro: vamos a seguir creciendo en Norteamérica, es importante remarcarlo”, ha remarcado el ejecutivo.
“Creo que la composición del crecimiento va a cambiar con el tiempo”, ha explicado Frisk. El grupo, asimismo, ha asegurado que “aunque las ventas estarán más presionadas a corto plazo, despejar los canales de distribución siempre es positivo” para perseguir el objetivo de “posicionar a la marca como premium”.
Under Armour no es la única compañía que ha apostado por contraer su red de distribución en los últimos meses. Nike, cuya estrategia de direct-to-consumer (DTC) se ha acelerado con la llegada de la pandemia, decidió cortar lazos con retailers estadounidenses como Zappos, Belk y Dillards, como en su día hizo con Amazon.
Under Armour pretende así potenciar sus propios canales de venta directa, así como “ofrecer menos descuentos y promociones para tener márgenes más saludables”, ha indicado la compañía. El grupo cerró los nueve primeros meses de 2020 con una facturación de 3.071 millones de dólares (2.622 millones de euros) y logró contener sus pérdidas en 733,6 millones de dólares (626,4 millones de euros).