La crisis del coronavirus ha cambiado muchas de las costumbres que tenía la sociedad. Tras el confinamiento la gente optó por vestir con ropa más cómoda dando alas a las empresas de retail deportivo, que vieron cómo sus ventas se disparaban. Sin embargo, la vacunación y una cierta vuelta a la normalidad podrían frenar esta tendencia y poner el foco en otros retos para el sector como las posibilidades del metaverso, la apuesta por la moda sostenible y la crisis logística a nivel mundial.
De cara al 2022 habrá diez grandes retos que marcarán la evolución del mundo del retail en conjunto, según el informe de State of Fashion 2022: An uneven recovery and new frontiers, elaborado por McKinsey. En él, también se destaca que la escasez de suministros golpeará duramente a toda la industria por lo que las empresas tendrán que anticiparse.
Una de las corrientes que más está conquistando al retail, y al que ya se han unido varias compañías como es el caso de Nike, es el de combinar la realidad con su entrada en el mundo virtual. El metaverso ha venido para quedarse y ya son muchas las marcas que han creado tiendas virtuales, juegos y eventos digitales. El informe destaca que esta tendencia irá a más, y que en 2022 el número de empresas virtualizadas aumentará.
Recientemente, la multinacional propietaria del Swoosh alcanzó un acuerdo con Roblox para tener su propio parque temático en su plataforma, Nikeland. El espacio de Nike incluirá edificios propios, lanzamiento de productos, minijuegos y otras activaciones para integrar a su comunidad digital. Además, se planea integrar momentos reales de partidos para simular eventos deportivos, como el Mundial o la Super Bowl.
Otro de los grandes retos del sector es la economía circular y la sostenibilidad de las prendas. Al igual que sucede con el metaverso, esta es una tendencia a la que ya se han sumado numerosas marcas pero que irá cobrando relevancia, no sólo en 2020, sino cada vez más a lo largo de los próximos años. Sin embargo, este concepto no sólo se aplica a los tejidos, sino también a la cadena logística, la venta y hasta el empaquetado.
Una camiseta de tenis sostenible de Infinite Athletic o las prendas deportivas de Brahdy, una marca Barcelona. El fitness con conciencia, desarrollado con prendas fabricadas con materiales reciclados, cada vez tiene más adeptos y cobrará cada vez más presencia, de acuerdo con el informe de McKinsey.
Factores importantes también a tener en cuenta en 2022 para el retail deportivo será el auge del comercio social, especialmente impulsado por las redes sociales; la certificación de productos para evitar las falsificaciones; la mejora de los sistemas de seguridad contra posibles ciberataques y la captación de talento.
Amenazas para el retail deportivo
Los problemas en el sector logístico y con las cadenas de suministros seguirán afectando a la industria durante todo el 2022. La escasez de recursos será uno de los problemas a gestionar por parte de las cadenas deportivas, muchas de las cuales ya han reportado problemas de suministro durante el último semestre de 2021. Para hacer frente a esta situación, las empresas ya han comenzado, en muchos casos, a aumentar el stock de productos en tienda y a trasladar parte de su producción a otros países más cercanos.
Este es el caso de Nike. Mientras que antes de la pandemia tardaba en torno a 40 días en transportar su mercancía de Asia a Estados Unidos, actualmente ese tiempo se ha duplicado, alcanzando los 80 días. “Esperamos que esta situación empeore durante el primer trimestre de 2022, no hemos sabido anticiparnos a esta situación”, defendió John Donahoe, presidente ejecutivo de la compañía.
De este modo, en 2022 la industria de la moda deportiva tendrá que saber adaptarse a la vuelta a la ‘normalidad’ y a un día a día que saltará de nuevo a los espacios abiertos y exteriores. El retail deportivo ha vivido un gran boom en el último año y medio y ahora tendrá que vigilar de cerca las nuevas tendencias que trae el nuevo año.
