En la industria del deporte, los datos de práctica de actividad física son un indicador clave porque de ello depende en gran medida el gasto deportivo de las familias, que fue al alza en 2021. Según el Observatorio Cetelem de Consumo en España, los españoles han gastado de media 156 euros en el último año para adquirir artículos deportivos, lo que supone un incremento del 13% interanual. Los clientes gastaron más en los ecommerces deportivos (139 euros) que en la tienda física (115 euros), según se desprende de una encuesta realizada a 2.200 españoles.

Además, se aumentó un 26% interanual el gasto en llenar la cesta de la compra online, mientras que en las tiendas convencionales se gastó de media un 9% más. En el último año, un 85% de los españoles ha comprado productos del sector deportivo, por el 83% de lo que va de 2021.

Pero, ¿en qué gastaron más los españoles? Las máquinas de fitness fueron los artículos que mayor desembolso supusieron, con una media de 216 euros, un 64% más que en 2020. Son cifras que demuestran el boom del home fitness, y no es extraño que sean el equipamiento que más gasto atrae, ya que son artículos de precio más elevado, en comparación con unas zapatillas de correr, una raqueta o un skate. Una bicicleta estática puede costar entre 500 euros y 3.000 euros, por ejemplo.

El equipamiento de fitness es la categoría de producto que mayor repunte de gasto ha experimentado en los últimos doce meses, seguido de los artículos pesca y caza y la compra de ropa y calzado deportivo, a los que se dedicó 116 euros.

Con todo, el desembolso en artículos de esquí fue el segundo más elevado, pero cayó respecto a 2020, en gran medida debido a las restricciones de movilidad y al cierre de estaciones de esquí, que provocó que los españoles dedicaran un presupuesto menor en adquirir este tipo de producto. De media, cada consumidor gastó 174 euros, un 3,8% menos que en 2020.

La Covid-19 no parece haber mermado la intención de compra de los consumidores, como demuestra que, de media, se está gastando más en 2021 que en 2020. De hecho, en 2020 el 65% afirmó que pudo realizar sus compras con normalidad en el sector deportivo, un porcentaje que en 2021 mejoró hasta el 72%. Un 18% apuntó que tuvo que cancelar momentáneamente su adquisición de productos, por el 7% que afirmó que dejó de comprar artículos sin saber si podría retomar esos planes antes de que acabara el año. Sólo un 3% afirmó que no retomaría sus compras tras no realizarlas por la crisis de la Covid-19.

Otra particularidad destacada del consumidor deportivo es el corto lapso de tiempo entre que surge una necesidad y la atiende comprando un producto. El 38% de los españoles adquirió un artículo el mismo día en que pensó en que lo necesitaba, por el 28% que lo hizo la semana siguiente y el 20% que lo adquirió el fin de semana siguiente.

Un 83% de los españoles ha comprado algún artículo deportivo en 2021

Además, el consumidor toma cada vez más decisiones de compra sin informarse del producto previamente: un 41% no realizó consultas previas (por el 29% del año anterior). El 26% que consultó un catálogo en papel u online de la tienda. Sólo dos de cada diez echaron un vistazo a webs especializadas y un 14% preguntó al personal de la tienda, el mismo porcentaje de españoles que consultó foros por Internet. Además, el 13% se fio de la recomendación de un conocido. En otras palabras: el 59% de los españoles compró artículos deportivos previa consulta en Internet, en la tienda o a amigos.

De cara al futuro, un 76% de los españoles prevé seguir comprando artículos deportivos antes de que acabe el 2021, por el 74% que apunta a que lo hará a lo largo de 2022. Pero, ¿qué creen que comprarán? Las máquinas de fitness pierden peso en la cesta de la compra, y sólo un 12% prevé hacer este tipo de adquisición en lo que resta de 2021, por el 9% que apuesta por equipar su gimnasio doméstico en 2022. Siete de cada diez españoles esperan adquirir textil y calzado deportivo en lo que resta de año y 2022, y un 8% apunta al equipamiento de deportes acuáticos. La buena noticia para los retailers es que la intención de gasto para los próximos doces meses se eleva a 181 euros por consumidor, lo que supondría un incremento del 16% interanual.