Lululemon mantiene la tendencia de las principales marcas deportivas. La compañía canadiense de artículos deportivos ha cerrado los tres primeros meses de su ejercicio fiscal, que va de febrero de 2021 a enero de 2022, con una facturación de 1.226 millones de dólares (1.007 millones de euros), un 88% más que en el mismo período del año anterior.
Su beneficio neto también se disparó y se ha multiplicado por cinco entre febrero y abril, hasta 145 millones de dólares (119 millones de euros). De cara a 2021 la previsión es que la facturación se sitúe en una horquilla de entre 5.825 millones y 5.905 millones de dólares (4.787 millones y 4.853 millones de euros).
“Los resultados de nuestro primer trimestre reflejan la fuerza que tenemos en todos los motores de crecimiento, alimentados por la expansión del ecommerce y un rebote en las tiendas físicas”, ha asegurado Calvin McDonald, consejero delegado de Lululemon.
La venta directa al consumidor ya supone el 55% de los ingresos totales del grupo, con 545 millones de dólares. El 82% de las ventas, sin embargo, aún se producen en Norteamérica, aunque la estrategia de expansión internacional empieza a dar sus frutos, pues Lululemon ha crecido un 125% interanual en el resto de mercados.