Garmin mantiene su ritmo ascendente en 2022 pese a las consecuencias de la crisis de suministros. El fabricante de dispositivos electrónicos ha cerrado el primer trimestre de 2022 con una facturación de 1.172 millones de dólares (1.106 millones de euros), un crecimiento del 9% interanual. Sin embargo, su beneficio neto se redujo en un 4% con respecto al 2021 y se situó en 211 millones de dólares (200 millones de euros).
Por categorías, el outdoor vuelve a ser el motor de las ventas tras registrar un crecimiento del 50% interanual, hasta 384 millones de dólares (362 millones de euros). Supone un giro respecto a los últimos años, en los que el fitness se había consolidado como la categoría que más facturación aportaba. Sin embargo, entre enero y marzo el fitness ha sufrido un importante retroceso que ha hecho reducir sus ventas un 28% interanual. Respecto al resto de divisiones destaca el crecimiento de la náutica, con un 21%, hasta los 254 millones de dólares (240 millones de euros).
Por territorios, el mercado americano y asiático han mantenido su tendencia al alza, mientras que el europeo se ha estancado. América representa la mitad del negocio total de Gramin, con 570 millones de dólares (538 millones de euros). Europa, Oriente Medio y África (Emea), aportó 397 millones de dólares (375 millones de euros).
El presidente y director general de Garmin, Cliff Pemble, ha asegurado que “los costes de transporte y el suministro de componentes siguen siendo elevados, mientras que surgen nuevos vientos en contra, como el fortalecimiento del dólar estadounidense y la incertidumbre creada por la invasión rusa de Ucrania en este entorno dinámico, seguimos centrados en crear productos altamente diferenciados que entusiasmen a nuestros clientes”.