Wolverine Worldwide rebota tras la Covid-19 y, como el resto de grandes marcas del retail deportivo, también supera los niveles prepandemia. El dueño de Merrell y Saucony ha cerrado los nueve primeros meses de 2021 con una facturación de 1.779 millones de dólares (1.535 millones de euros), un alza interanual del 38,8%.
El beneficio neto también se ha más que duplicado entre enero y septiembre, pasando de 32,6 millones en 2020 a 82 millones de dólares este año (70,7 millones de euros). Pese a todo, el grupo admite que “Merrell ha sido severamente impactada por los cierres de fábricas en Vietnam pero, a pesar de todo, ha logrado crecer en el tercer trimestre”.
Se estima que los problemas en la cadena de suministro han causado 60 millones de dólares en impacto económico a Wolverine. A pesar de ello, el grupo estadounidense espera que sus ingresos aumenten un 35% interanual en 2021, hasta 2.400 millones de dólares (2.070 millones de euros). La compañía no especifica su facturación por marcas ni territorios.