Columbia avanza con cautela ante la incertidumbre que arroja el mercado. La marca deportiva estadounidense cerró el primer semestre de 2022 con una facturación de 1.339,5 millones de dólares (1.313 millones de euros), un aumento de un 12%. Sin embargo, el beneficio de la empresa se redujo un 23,4% respecto al mismo periodo del año pasado, situándose en 74 millones de dólares (72,4 millones de euros), lo que junto al entorno de mercado ha hecho que el grupo recorte previsiones para el ejercicio actual.
En el segundo trimestre del año, la firma especializada en calzado y ropa de deporte outdoor registró un volumen de negocio de 578 millones de dólares (566,3 millones de euros), una mejora mínima de un 2%. Por el contrario, las ganancias que obtuvo la empresa en este periodo se desplomaron un 82%, cayendo desde los 40,6 millones de dólares (39,7 millones de euros) en el segundo trimestre de 2021, a los 7,1 millones de dólares (6,9 millones de euros) en el mismo periodo del ejercicio actual.
Por mercados de actividad, las ventas de Columbia vivieron su mayor subida en la región de Canadá, donde los ingresos se dispararon un 44% durante el primer semestre de 2022, pasando de unas ventas de 55 millones de dólares (53,9 millones de euros), a los 79,4 millones de dólares (77,8 millones de euros) facturados en el ejercicio actual. A pesar de ello, Estados Unidos sigue representando el principal mercado para la firma deportiva, ya que obtiene en él un 67% de su facturación. En el primer semestre del año, los ingresos obtenidos en EEUU fueron de 914,4 millones de dólares (896 millones de euros), un incremento interanual del 16%.
La región de Latinoamérica y el Pacífico también presentó una evolución favorable con un incremento de la actividad de un 9%, alcanzando los 207,1 millones de dólares (202,9 millones de euros). Por último, se situaron Europa, Oriente Medio y África (Emea), donde los ingresos subieron un 2%, hasta los 162,1 millones de dólares (158,8 millones de euros).
En cuanto a la evolución por categoría de producto, la ropa, los accesorios y el equipamiento continúan representando en torno a un 77% del volumen de negocio de Columbia, con unos ingresos de 1.050 millones de dólares (1.028,9 millones de euros) en el primer semestre. Por otro lado, el calzado aporta una facturación al grupo de 312,7 millones de dólares (306,4 millones de euros).
Por marcas, Columbia sigue siendo el principal pilar del grupo y aporta un 84,5% de la facturación total de la compañía estadounidense. Los ingresos originados por esta marca en el primer semestre fueron de 1.157 millones de dólares (1.113,7 millones de euros). Por detrás se sitúa Sorel, que mejoró sus ventas un 34% en los seis primeros meses del año, aportando unos ingresos de 93 millones de dólares (91,1 millones de euros).
Previsiones y retos
A pesar de que la compañía mantiene una previsión positiva de cara a la segunda mitad del año, desde Columbia destacan que existen una serie de factores que podrían dificultar la actividad de la empresa. Entre ellos citan a la situación sanitaria originada por la Covid-19, el entorno macroeconómico marcado por una subida de la inflación y los continuos parones en la cadena logística y de suministro.
Es por ello que, pese a haber cerrado el primer semestre con unos resultados positivos, el grupo ha optado por recortar su previsión de cara al conjunto del ejercicio de 2022. Así, la firma especializada en calzado y ropa outdoor, prevé cerrar el año con una subida de su facturación de entre un 10% y un 12%, frente al incremento de entre un 16% y un 18% que había adelantado anteriormente.
“Hemos cerrado el primer semestre del año con una subida de las ventas en todas nuestras marcas y un crecimiento de un 12%. De cara a la segunda mitad del año, en la que generalmente tenemos un menor nivel de ventas, esperamos que las tendencias de actividad varíen en función de cada región. Mientras unos mercados han visto como la demanda subía notablemente, otros se siguen viendo afectados por restricciones y problemas en la cadena de suministro”, ha destacado TimBoyle, presidente ejecutivo de Columbia.