La Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (Cnmc) da por cerrada la investigación a Adidas. El regulador de la competencia ha determinado que la compañía alemana ha eliminado las cláusulas anticompetitivas que impedían la venta cruzada a sus franquiciados al menos durante un año, plazo que se marcó el organismo para investigar el caso.

La resolución agota la vía administrativa de los franquiciados a reclamar, aunque deja abierto durante dos meses, hasta julio (la sentencia salió el 4 de mayo) para acudir a la vía judicial. Es decir, los franquiciados aún podrían recurrir a la Audiencia Nacional para reabrir el caso.

La Cnmc abrió el caso en 2018, cuando se detectó que Adidas había introducido cláusulas en los contratos de sus franquiciados con prácticas abusivas y obligaciones desproporcionadas. Entre ellas figuraban la venta cruzada entre distribuidores y franquiciados o vender los productos a través de internet, limitando su margen e ingresos. Ambas prácticas están prohibidas por la Ley de Defensa de la Competencia (LDC).

En febrero de 2020, justo antes de la pandemia, Adidas alcanzó el compromiso de eliminar estas prácticas, bajo la supervisión de la Cnmc durante un año. Además, ahora un franquiciado de Adidas también podrá abrir otra tienda de otra marca, sin tener que ceñirse en exclusiva a la firma alemana. Tampoco se validará ya previamente la dirección de Internet que utilizarán sus socios para vender online.

En el momento de la sanción, Adidas contaba en España con cerca de sesenta puntos de venta, de los cuales cerca de cuarenta están operados por terceros en régimen de franquicia. Todo ello, además, meses después de perder a Valadri, su principal franquiciado en la Península Ibérica, que entró en quiebra en 2019.

Adidas España cerró 2019 con una cifra de negocio de 474,6 millones de euros, un 6,6% más que el año anterior. Su beneficio neto se disparó un 55%, hasta 13,25 millones de euros, según las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil.