Callaway dispara sus ventas, de nuevo aupada por el negocio de Topgolf. La compañía especializada en fabricación y distribución de artículos deportivos ha cerrado el primer semestre de 2022 con una facturación de 2.156 millones de dólares (2.113 millones de euros), un 37,7% más que en el mismo período del año anterior.
El incremento corresponde únicamente con Topgolf, que aportó 725,7 millones de dólares (711,3 millones de euros), un 73% más interanual. La venta de equipamiento de golf también aumentó un 18%, hasta 920 millones de dólares (901 millones de euros), mientras que la de artículos de lifestyle lo hizo un 38%, hasta 510,3 millones de dólares (500 millones de euros).
De cara al cierre del ejercicio la compañía espera rozar la barrera de los 4.000 millones de dólares en ventas, un 20% más que en 2021. “El segundo trimestre ha sido muy sólido, con crecimiento en todas nuestras categorías clave y regiones. La demanda continúa fuerte y el margen, precios y otros negocios siguen mejorando a lo largo del año a pesar de la ubicua inflación, la desfavorable situación de las divisas y otros retos estacionarios”, ha añadido Chip Brewer, presidente y consejero delegado del grupo americano.
Finalmente, Callaway cerró el semestre con unas ganancias de 364,2 millones de dólares (357 millones de euros), que contrastan con las pérdidas de 172 millones de dólares registradas en el primer semestre de 2021, correspondientes al cierre de la integración de Topgolf.
