Asics coge carrerilla y deja atrás el impacto de la pandemia. La compañía japonesa especializada en ropa y calzado deportivo cerró el 2021 con una facturación de 404.082 millones de yenes (3.090 millones de euros), un 22% más que en 2020. El grupo registró un beneficio de 9.380 millones de yenes (71 millones de euros), dejando atrás las pérdidas del ejercicio anterior de 16.126 millones de yenes (127 millones de euros).
A pesar de que la compañía ha destacado el impacto que la Covid-19 ha tenido durante el 2021 en su cuenta de resultados como consecuencia de las restricciones, Asics logró mejorar sus ventas en todos sus mercados. Japón lideró el negocio del grupo con ventas por valor de 109.000 millones de yenes (819 millones de euros), un 16,4% más. Le siguieron Europa y América del Norte con una facturación de 106.000 millones de yenes (796 millones de euros) y 86.100 millones de yenes (650 millones de euros), un crecimiento interanual del 22,1% y 31,8%, respectivamente.
Por categoría de producto, el sector del running fue el ganador absoluto con un total de 208.200 millones de yenes (1.546 millones de euros) en ventas. Esta cifra supone un 50% de la actividad del grupo y un crecimiento de un 31% respecto a 2020. Por detrás del running se situaron las categorías de equipamiento técnico y de calzado con una facturación de 41.300 millones de yenes (310 millones de euros) y 38.500 millones de yenes (289 millones de euros).
Asics ha destacado que actualmente trabajan para seguir reforzando su cadena logística ante la crisis de suministro que se vive a nivel mundial y que tienen previsto reforzar sus esfuerzos en el área digital para crecer en el mundo de los NFTs. “Queremos reforzar la división de tecnología y activar nuevas propuestas para disfrutar del deporte utilizando lo digital”, han destacado en su nota de resultados.
Previsiones
De cara al actual ejercicio de 2022 la empresa japonesa tiene previsto cerrar el año con un crecimiento de su facturación de un 3,9%, alcanzando los 420.000 millones de yenes (3.516 millones de euros). Además, la compañía especializada en ropa y calzado deportivo espera terminar el 2022 con una mejora de los ingresos en todas sus divisiones de producto.
Asics prevé que los mercados que más crezcan en 2022 sean los del sudeste de Asia y la región de China, que han sido los más afectados por los problemas en la cadena de suministro y la caída de la demanda. El grupo japonés sólo espera un estancamiento del negocio en Japón, donde espera que las ventas caigan un 1,7% y en Oceanía, donde esta caída alcanzaría un 7,1%, según sus previsiones.
En cuanto a las categorías de producto, Asics pone el foco en su marca de calzado, Onitsuka Tiger, que tras un buen 2021 espera que repunte un 15,4% en 2022 alcanzando una facturación de 44.500 millones de yenes (334 millones de euros).
