Asics saca la cabeza impulsado por el buen momento de las marcas deportivas en el arranque de 2021. La compañía japonesa dedicada a la fabricación y distribución de artículos deportivos cerró los tres primeros meses del año con una facturación de 106.549 millones de yenes (806,3 millones de euros), un 24,8% más interanual.
Asimismo, la firma nipona logró dejar atrás los números rojos del primer trimestre de 2021 y volvió a entrar en beneficio. Sus ganancias se situaron en 10.489 millones de yenes (79,4 millones de euros) en los tres primeros meses del año.
Asics espera cerrar 2021 con un beneficio operativo de entre 11.500 y 13.500 millones de yenes (87 y 102 millones de euros), mientras que su facturación se situará en una horquilla de entre 385.000 y 395.000 millones de yenes (2.913 y 3.000 millones de euros).
El impulso a sus ventas y su rentabilidad ha llegado “por la categoría de running y las operaciones en China y Europa”, ha destacado el grupo en un comunicado. Esta categoría, de hecho, aumentó sus ingresos en un 40% interanual, hasta 54.468 millones de yenes (412,2 millones de euros).
También lo hicieron la moda deportiva, otras categorías deportivas técnicas y la venta de textil y equipamiento, así como la marca Onitsuka Tiger. El running, sin embargo, aporta más de la mitad de las ventas de Asics y fue la categoría que se anotó el mayor crecimiento.
En cuanto a los mercados, Asics se anotó un incremento en los ingresos del 0,5% en Japón, que aporta más de dos tercios de las ventas con 30.485 millones de yenes (230,7 millones de euros). En Norteamérica el aumento fue del 20%, hasta 18.820 millones de yenes (142,4 millones de euros).
El mayor incremento se produjo en China y Europa. En el Viejo Continente Asics creció un 43,4%, hasta 31.121 millones de yenes (235,5 millones de euros), mientras que en el gigante asiático casi duplicó su facturación, hasta 13.572 millones de yenes (102,7 millones de euros).