Under Armour prosigue su desescalada en el deporte profesional estadounidense. La compañía ultima la finalización de su acuerdo de licencia con la NFL en la misma semana que se disputará la Super Bowl, según Financial Times.
Una vez se rompa este acuerdo, Under Armour no podrá vender artículos que utilicen la licencia de la NFL y sus franquicias. Este negocio afecta principalmente a los atletas a los que patrocina, como Tom Brady, que disputará la Super Bowl con su equipo. De esta forma, la marca sólo podrá asociar el nombre de los jugadores a sus propias colecciones.
“Estamos en conversaciones activas con la NFL para determinar oportunidades alternativas y garantizar lo mejor para Under Armour”, ha asegurado Sean Eggert, director de marketing deportivo, a Financial Times. Por ahora se desconoce cuándo expira el actual acuerdo, aunque diferentes fuentes han indicado que lo haría al términos de este año.
Se estima que un acuerdo de estas características aporta entre 10 millones y 15 millones de dólares a la NFL. A falta de conocer los resultados económicos del último ejercicio, Under Armour comprometió una inversión en patrocinio de 679 millones de dólares en 2019, aunque tras la pandemia ha puesto fin a algunos de sus principales activos y anteriormente también había perdido el patrocinio técnico de la MLB.
Under Armour cerró los primeros nueve meses con unas pérdidas de 733,6 millones de dólares (600 millones de euros). En términos de facturación, Under Armour vendió un 19,7% menos interanual, hasta 3.071 millones de dólares (2.508 millones de euros).
