El mundo cripto está en shock esta semana, y por ende, la industria deportiva asume incertidumbre. La empresa de criptomonedas FTX, que iba a ser adquirida por su rival Binance, podría dejar pendiendo de un hilo varios importantes acuerdos comerciales en el deporte estadounidense. ¿El motivo? La renuncia de Binance de comprar la compañía tras analizar sus cuentas.
En los últimos días se han alimentado los rumores de una crisis de liquidez por parte de FTX, que también estaría siendo investigada por las autoridades estadounidenses por un posible manejo incorrecto de los fondos. Esto ha llevado a que 6.000 millones de dólares se esfumaran de su cartera.
La renuncia de Binace tras realizar la due diligence ponen en jaque acuerdos de gran tamaño como el de los naming rights del club de esports TSM, valorado en 210 millones de dólares, el patrocinio global firmado el pasado diciembre con los Golden State Warriors de la NBA para lanzar su marketplace de NFTs y criptomonedas, el naming del pabellón de los Miami Heat o el que firmó con la escudería Mercedes de Fórmula 1. Asimismo, la compañía tiene como embajadora a la tenista Naomi Osaka y es la cripto oficial de la MLB de béisbol.