Wanda Group pone fin a la aventura en Bolsa de su filial deportiva. La compañía ha presentado una oferta de exclusión para Wanda Sports, con el objetivo de recuperar el 100% de la compañía. Eso sí, lo hará con un fuerte descuento, pues apenas desembolsará 59,5 millones de dólares (50,8 millones de euros), frente a los 190 millones de dólares (162,3 millones de euros) que obtuvo en julio de 2019 con su salto al Nasdaq.

La aprobación está garantizada y falta ver si se adhieren todos los minoritarios, pues el hólding chino posee el 71,68% de las acciones y el 91,01% de los derechos de voto. La oferta es de 2,50 dólares (2,1 euros) por cada título depositario y de 1,67 dólares (1,4 euros) por cada acción ordinaria.

“Nuestra propuesta brinda una oportunidad muy atractiva para los tenedores […], especialmente durante un período de incertidumbre constante sobre el Covid-19”, señala el grupo, que asegura que se trata de una prima de emisión del 38,9% respecto al 29 de septiembre y del 33,1% respecto a la cotización media de los últimos diez días.

El hólding chino, que en julio logró formalizar definitivamente la venta de Ironman, cerró el primer semestre de 2020 con una caída de ingresos del 50%, hasta 215,4 millones de euros. El retroceso entre abril y junio fue del 75% interanual.

El deterioro del negocio continúa afectando a su rentabilidad, pues el impacto de algunas desinversiones le han llevado a incurrir en unos gastos extraordinarios de 55,4 millones de euros, que explican que las pérdidas asciendan a 54,2 millones. De no ser por esto, el beneficio neto sería de 1,4 millones, muy por debajo de los 15,9 millones que logró en los primeros seis meses de 2019.

La línea de negocio que mejor resistió fue la de venta de derechos comerciales y audiovisuales de competiciones de terceros, pese a que sufrió una caída del 46%, hasta 178,1 millones de euros. La cancelación de todas las pruebas de participación masiva, como maratones, provocó un hundimiento del 94% de esta actividad, hasta 1,3 millones de euros.

Si bien las operaciones de Ironman explican parte de las pérdidas del primer semestre, Wanda confía en que su venta le permitirá avanzar en su plan de crecimiento. De entrada, es una operación valorada en 380 millones de dólares que dejará 208,7 millones de euros en caja que el consejo de administración ha decidido destinar a retribuir a los accionistas y lanzar nuevas iniciativas corporativas.