Telefónica continuará siendo el hogar del mejor fútbol en España al menos hasta 2022. Eso sí, lo hará con una factura inferior a partir de 2021-2022, después de que ayer confirmara que retendrá los derechos de la Champions League en el país por 325 millones de euros anuales. Es decir, un ajuste de aproximadamente el 10% respecto a los 360 millones de euros que pagaba actualmente, pese a que ahora tendrá más derechos en exclusiva, como la Europa League, la nueva Conference League o el negocio de los bares.
El grupo de telecomunicaciones celebró ayer en un comunicado que el precio total de la adjudicación para todas competiciones está “por debajo del precio pagado en el presente ciclo y sin incrementos interanuales”. En total serán 975 millones de euros entre 2021-2022 y 2023-2024, anticipando una tendencia hacia la estabilización de precios que podría extenderse al concurso que abrirá LaLiga en los próximos meses para el periodo 2022-2025.
En el caso de la Uefa, la multinacional recuerda que, si anteriormente pagaba 360 millones sólo por la exclusiva de estos dos torneos al completo, ahora también tendrá Supercopa de Europa, Youth League, Europa Conference League, además de los derechos tanto para el segmento residencial como el denominado horeca, que actualmente compartía con Mediapro.
Movistar+ paga 980 millones por LaLiga Santander, 325 millones por la Champions y 35 millones por LaLiga SmartBank
Emilio Gayo, presidente de Telefónica España, aseguró ayer que este acuerdo “es una clara demostración” de que el fútbol “es un activo que impulsa el negocio y le aporta rentabilidad”. “Nuestra plataforma Movistar+ continúa trabajando para seguir haciendo accesible el fútbol en nuestro país”, recordó, sobre una estrategia que le llevó a imponerse en la última licitación de LaLiga y renunciar a la Premier League para decidir complementar el fútbol más premium con la Bundesliga y la Serie A.
A corto plazo, el nuevo acuerdo permitirá a la telecos que la factura anual que paga se rebaje a unos 1.350 millones de euros anuales en 2021-2022. Ese año, la compañía pagará los mencionados 325 millones por las competiciones de la Uefa, a los que se añadirán 980 millones por LaLiga Santander y otros 35 millones por LaLiga SmartBank, según se recoge en sus cuentas anuales. A este importe se añaden otros 10 millones aproximadamente por el resto de ligas internacionales.
A diferencia de la estrategia de Vodafone, Movistar+ sí ha decidido convertir el deporte rey en uno de los contenidos sobre los que anclar la captación de abonados a su televisión de pago. Esta apuesta es la que le ha permitido mantener su base de clientes por encima de los cuatro millones de hogares y consolidarse como la plataforma que más ingresa de media por cada contrato.
Esta ofensiva específica por el balón ha obligado a Telefónica a renunciar a algunos de los derechos históricos que había tenido bajo su paraguas. Los tres casos más importantes han sido MotoGP, Premier League y Euroliga, que decidieron firmar hace un año con Dazn porque mejoraba de forma importante la factura anual por sus retransmisiones en España. El Mundial de Motociclismo percibe cerca de 55 millones anuales, mientras que la liga inglesa de fútbol se embolsa 19 millones y la competición europea de baloncesto cobra 15 millones.