Italia da un paso al frente para favorecer los ciclos audiovisuales a largo plazo. El país transalpino ha aprobado hoy un cambio en la legislación audiovisual para que las competiciones puedan comercializar sus derechos en ciclos de hasta cinco años, según ha informado en un comunicado.
Los derechos deportivos estaban limitados hasta ahora a un máximo de tres años. Era uno de los países de Europa con menor duración, ya que en España también se permite alcanzar los cinco años de ciclo (el actual con Dazn y Movistar va de 2022-2023 a 2026-2027). En Inglaterra, sin embargo, también son de tres años (2022-2023 a 2024-2025), mientras que el último contrato de la Bundesliga en Alemania es por cuatro años (2021-2022 a 2024-2025).
En la Ligue-1, tras la ruptura con Mediapro, se optó por una situación de emergencia y no se ha lanzado un paquete audiovisual a medio plazo. La nueva licitación saldrá este año y será por cinco años, desde 2023-2024 a 2027-2028.
Ampliar la duración de los ciclos audiovisuales es una reivindicación histórica de las ligas europeas. En España y otros países se han topado con la opinión de los reguladores de la competencia, que aún consideran que vulneraría el derecho a la competencia de otros operadores. Los gestores, sin embargo, consideran que es la única forma de generar más ingresos en un momento de estancamiento, pues solo así se puede garantizar a los operadores más estabilidad, un mayor retorno en su inversión, y un producto de más valor para el fan.
La estrategia no es nueva, ya que los ciclos en Estados Unidos suelen ser por toda una década. El último acuerdo de la NFL garantiza 105.000 millones (a falta de vender algún lote) entre 2023 y 2033. El de la NBA, que acaba en 2024, también alcanzará la década de duración, lo mismo que ha firmado Apple por los derechos internacionales de la MLS, entre otras.