El gigante norteamericano Topgolf ya ha definido su plan para desembarcar en España. La compañía estadounidense especializada en recintos recreativos de golf ha cerrado una alianza estratégicapara debutar en el mercado español y portugués, para lo que ha comprometido una inversión de 30 millones de euros en cada centro. Se estima que cada instalación creará 400 puestos de trabajo durante el periodo de construcción y otros 450 trabajadores tras la apertura.
El objetivo es levantar centros de ocio donde el golf sea el protagonista, con 102 puestos para jugar al aire libre. Cada pista estará equipada con Toptracer, un sistema dotado con cámaras de vídeo y pantallas que captan y monitorizan cada golpe, permitiendo la gamificación de cada partida y establecer rankings, como si de una partida de bolos se tratara. El modelo de Topgolf en España y Portugal también plantea que cada club cuente con tres restaurantes, así como oferta de ocio y música, zonas para la organización de eventos privados y programas familiares.
La irrupción de Topgolf en la Península Ibérica está pilotada por Pablo Juantegui, ex consejero delegado de Telepizza y drectivo al frente de BAJ Golf Develipment Iberia, que es la promotora que se ha hecho con los derechos de la marca en este mercado, como ya adelantó 2Playbook. “Estamos muy emocionados de traer Topgolf a España y Portugal y poder ofrecer esta experiencia única a nuestra población. Topgolf está transformando el juego del golf”, afirma el directivo.
La compañía aprovechará la amplia trayectoria de Topgolf, que cuenta con 90 establecimientos repartidos entre Estados Unidos, Reino Unido, Australia, China, Alemania, México, Tailandia y Emiratos Árabes Unidos (EAU). La empresa busca expandirse no sólo por Europa central, sino también por Asia y Latinoamérica. Su objetivo es contar con 250 clubes en el Viejo Continente, Australia y Asia, con una previsión de facturación de 1,1 millones de dólares por cada centro franquiciado.
Ben Sharpe, director general de franquicias de Topgolf y presidente de Toptracer a escala global, no ha confirmado cuántos centros se abrirán en España y Portugal, pero la idea es desarrollar varios en los próximos años. “Queremos acercar nuestra propuesta a todavía más personas con nuevas sedes en toda la Península Ibérica”, asegura, al admitir que “en BAJ hemos encontrado a los socios ideales para llevar nuestra experiencia de golf a la región”.
La compañía pertenece al grupo Topgolf Callaway Brands, y surgió tras la fusión en 2020 de los clubes de golf y la Callaway, especializada en equipamiento para la práctica de este deporte. En la actualidad, cuenta con una cartera de marcas que incluyen Topgolf, el fabricante de equipamiento Callaway Golf y Odyssey; TravisMathew; el sistema Toptracer; las mochilas y bolsas OGIO; la marca de senderismo Jack Wolfskin, y la plataforma de entrenamientos online World Golf Tour. El grupo facturó cerca de 4.000 millones de dólares en 2022 tras crecer un 27,5% y ganó 157,9 millones de dólares (146,9 millones de euros).
