La batalla por captar la atención del aficionado se ha vuelto cada vez más ardua. Distintos canales y plataformas, contenidos 24/7 para fidelizar más allá del día de partido, nuevos formatos… El deporte campea hoy contra los gigantes del entretenimiento y toda la oferta de ocio para mantener su atractivo. Todo ello mientras busca un mayor conocimiento de sus fans a través de nuevas herramientas de big data que le permitan segmentar audiencias para sus patrocinadores. En España los datos muestran que el consumidor es principalmente varón, con estudios superiores y que prefiere ver deporte por televisión a ir al estadio.
El perfil básico se desprende de los datos publicados en la última Encuesta de Hábitos Deportivos 2022, elaborada anualmente por el Ministerio de Cultura y Deporte. Los datos dejan lecturas muy diversas. Una de ellas es que el 84% de los hombres asistió presencialmente o vio deporte por medios audiovisuales, frente al 66,1% de las mujeres.
Ver deporte por televisión u otros dispositivos es la opción predilecta en ambos géneros (82,3% de los hombres y 62,6% de las mujeres). La asistencia, sin embargo, cae al 39,4% y 23,4%, respectivamente. El salto se aprecia por igual en todas las franjas de edad y grupos de población. El matiz más interesante es que las franjas de 15 a 19 años y de 20 a 24 años son las que consumen más deporte, con un 88,1% y un 82%, respectivamente.
Supera a las franjas que tradicionalmente habían liderado el consumo deportivo, de 45 años en adelante, que ahora se quedan a la cola. Los grupos de edad coinciden con el nivel de estudios, ya que el 85,4% indica que aún es estudiante, mientras que un 78% está empleado. Además, un 81,6% tiene estudios superiores de FP o similar y un 79,8% otro tipo de educación superior, como la universitaria. Son los dos grupos que más destacan por nivel de estudios.
En cuanto a las comunidades autónomas, no se aprecia una brecha en el consumo deportivo. Sólo en Baleares cae por debajo del 70% en asistencia o consumo audiovisual, y ninguna alcanza el 80%. La más próxima es la Comunidad de Madrid, con un 79,1%, seguida de Euskadi (77,8%) y Asturias, con idéntico porcentaje. Cataluña, por el contrario, es la segunda por la cola con un 71%.
Otro dato interesante es el cruce entre la práctica deportiva y el consumo. El 42,3% de la población asegura que fue a un recinto deportivo, lo vio por algún medio audiovisual y además practicó deporte en 2022. Este porcentaje es superior entre los hombres (50,6%) que las mujeres (32,8%). Es una muestra más de la gran brecha que aún existe para llegar al público femenino en la práctica de deporte, ya que no alcanza ni un tercio de la población.
Incorporar a la mujer es la clave para aumentar la repercusión, ya que sólo el 31% de la población total asistió o vio un espectáculo deportivo. El fútbol fue el más seguido, elegido por el 20,7% de la población. Le sigue el baloncesto (6%) y el resto de deportes de equipo (8%). Los deportes individuales fueron escogidos por el 7,9% de las personas. De nuevo, el fútbol es la opción predilecta entre los 15 y los 24 años, con una media próxima al 33%.
Por tipo de competiciones, el 26,6% de la población española asistió a competiciones masculinas, mientras que el 7,5% eligió las femeninas. Sólo un 4,8% vio o asistió a pruebas de categoría mixta, que suelen ser principalmente de atletismo o deportes individuales. Entre las de categoría masculina, el fútbol se impone con un 19,4%, mientras que en las femeninas otros deportes de equipo (2,8%) aún superan al balompié (2,4%) y al baloncesto (1,5%).
Por último, cabe destacar que en fútbol el 50,3% pagó entrada a un precio normal, y sólo un 0,3% optó por la reventa. Las entradas gratuitas aún fueron elegidas por el 9,9% de la población, mientras que el abono gana fuerza y ya es la primera opción del 31,7% de las personas. En baloncesto los datos muestran otra realidad, aunque la mayor parte también optó por la entrada full price (53,6%). El abono aún es muy inferior al fútbol (16,5%), el mismo porcentaje que presenta la asistencia con entradas gratuitas.
En cuanto al tipo de compra de entradas, la mayoría aún opta por hacerlo en taquilla, tanto en fútbol como en baloncesto, aunque la compra por internet ha ganado peso y ya casi está pareja a las taquillas.