El pádel intensifica su expansión europea. La disciplina ha entrado con fuerza en muchos países y cada vez crece a un ritmo más rápido. El número de pistas construidas desde 2016 se ha triplicado y ha crecido a un ritmo medio anual del 20%. No obstante, el potencial por explotar de este deporte es muy amplio y se prevé una inversión en 1.000 millones de euros en pistas entre 2022 y 2025, alcanzando los 67.000 equipamientos en el Viejo Continente dentro de cuatro años.
Así se desprende del estudio Global Padel Report, realizado por la consultora Monitor Deloitte en colaboración con Playtomic. Partiendo desde el sur de Europa, el mercado español es el primero en pistas y clubes. España es con diferencia el primer mercado del mundo del pádel, pero no el que más ha invertido en los últimos años. Este honor lo tienen Suecia e Italia con un de 83,5 millones y 77,6 millones de euros, respectivamente, en los dos últimos años. Son cifras que ponen de referencia donde ha crecido más la disciplina en los últimos años después de que España se haya consolidado como principal mercado. España ocupa la tercera posición del ranking inversor, con 36,1 millones de euros en los últimos dos años. En ese periodo, en Europa se han invertido 279 millones de euros en construir pistas de pádel en los doce principales países europeos.
Pese al avance del mercado transalpino, este se encuentra cinco años por detrás en desarrollo de mercado. Francia y Bélgica le van a la zaga a italianos y suecos en un período en el que se han creado 5.068 clubes, lo que significa que se ha más que doblado respecto al 2016. En número de pistas los números no se quedan atrás, ya que en solo cinco años se han creado 16.161, un aumento del 181%. Cifras que se incrementaron durante la pandemia hasta las 98 pistas y los 29 clubes semanales.
Pero, ¿qué países lideran el ranking de ingreso promedio por pista? Emiratos Árabes Unidos, con unas ventas de 155.000 euros por cada una. Le sigue Suecia, con 95.000 euros, e Italia, con 82.000 euros por cada pista. España y Portugal están a la cola del ranking europeo, con 39.000 euros y 25.000 euros de facturación anual por cada pista.
Cerca de 18 millones de personas practican esta disciplina en el mundo, de los cuáles 300.000 están federados. Ahora bien, la disponibilidad de cada vez más equipamientos de pádel facilita que estos datos sigan creciendo de forma similar. De hecho, en sólo un lustro se ha pasado de disponer una pista de pádel por cada 39.549 habitantes a una pista por cada 15.030 ciudadanos.
Una media que sigue muy lejos de España y Suecia donde los aficionados al pádel disponen de una pista por cada 3.500 personas. De hecho, el mercado sueco se ha disparado de tal forma desde 2019 que ha superado la tasa de población por pista de España.
En el caso de España, cerca de 3,5 millones de personas acostumbra a practicar esta disciplina, unas cifras que ya se encuentran por encima de los que juegan a un deporte con mayor tradición e implantación como el tenis, algo que también sucede en el caso de Suecia. El país nórdico registra alrededor de 540.000 practicantes, por 500.000 jugadores de Italia, los 200.000 palistas de Portugal y 100.000 practicantes de Bélgica.
A nivel profesional, la situación se reproduce de la misma manera. España concentra la mayor parte de los torneos del World Padel Tour (WPT), con 20 eventos de un total de 25; y en el nuevo circuito de Premier Padel, organizado por la FIP, es el país con más torneos después de Italia, con 4 torneos de nivel medio y 7 de máximo nivel. No en vano, el pádel español lidera el ranking masculino y femenino europeo y mundial y concentra dos tercios de los jugadores profesionales del WPT.