Europa avanza, aunque lentamente, hacia una mayor práctica deportiva y esto abre nuevas oportunidades para los operadores españoles. Mientras en 2014 la media de practicantes estaba en el 47,4%, esta cifra aumentó hasta el 50,7% en 2019, según los últimos datos publicados por Eurostat. Sin embargo, todavía hay países cuyo nivel de actividad física está muy por debajo de esta media – como es el caso de Francia, Italia, Portugal o Bélgica – y que suponen un importante nicho de mercado para la industria del deporte.
La agencia estadística europea entiende como practicante deportivo a aquellos ciudadanos que realizan actividad física al menos una vez a la semana, bien sea aeróbica, de fuerza o ambas. Tomando este dato como referencia, la última encuesta continental revela que, a nivel de densidad de población y cercanía con España, son Francia, Italia y Portugal los que presentan las menores tasas de actividad de la Unión Europea (UE). En el caso de España, la tasa de práctica deportiva está ligeramente por encima de la media, con un 52,2% en 2019, pero aumentó 5,2 puntos porcentuales en cinco años.
En el caso de Francia esta cifra se situaba en el 41,6% en 2019, ligeramente por encima de los datos que presentaban Italia y Portugal, con un 31,1% y un 26,9% respectivamente. Este es el porcentaje de la población que admitió haber hecho ejercicio de cardio o musculación una vez a la semana. A estas regiones hay que sumar también el ejemplo de países como Bélgica o Grecia, donde el porcentaje de usuarios que realiza actividad física es de un 38% y un 28,6%. A pesar de que estas cifras son bajas y se encuentran por debajo de lo que es habitual en el Viejo Continente, la realidad es que ninguno de estos países lidera el final del ranking. Turquía y Rumania son los países más inactivos de la región, con un 7,6% y un 8,8% de práctica deportiva.
Las cadenas de fitness españolas no son ajenas a esta realidad. Compañías como GO fit y Forus ya han dado sus primeros pasos para expandirse en Italia, un mercado donde, antes de la llegada de la pandemia, el fitness movía más de 2.000 millones de euros anuales, situándose como el quinto mercado dentro de Europa por volumen de negocio. En el caso de la gestora presidida por Gabriel Sáez, se negocia desde hace meses la construcción de un gran complejo en Milán, mientras que Forus compró 18 centros deportivos a los que también sumó un contrato en concesión.
En el caso de Metropolitan, la compañía liderada por los hermanos Pellón apostó por el mercado francés con la apertura de un club en Niza. Hay que tener en cuenta que, pese a que Francia es uno de los países con más densidad de población de Europa, la realidad es que únicamente un 8% de su población está apuntada a un gimnasio. Este dato resulta sorprendente si se tiene en cuenta que el país es el tercer mayor mercado del fitness de Europa, con un volumen de negocio de 2.500 millones de euros, antes de la crisis sanitaria. Todo ello hace que el país vecino de España sea una de las regiones con mayor potencial de crecimiento para las empresas españolas, especialmente en el segmento de gimnasios premium.
En el último año otras firmas españolas - del sector retail - han dado sus primeros pasos para expandir su actividad en Europa. Buen ejemplo de ello es Pádel Nuestro, que en 2022 abrirá tres tiendas en Nápoles, Catania y Brescia (Italia); Berria, que ha puesto el foco de su expansión en Italia, Alemania y Francia, y All For Padel que ya tiene presencia en Italia y destaca el fuerte crecimiento del pádel en países como Bélgica o Francia. De este modo, las empresas optan por países con una densidad de población importante y donde han detectado que el potencial de crecimiento de la tasa de práctica deportiva es alto.
Potencial del público femenino y los ‘silver’
Uno de los principales nichos de mercado para la industria del deporte, en todos los países, es el público femenino. Mientras la media de práctica deportiva en Europa en 2019 era de un 57,7% en el caso de los hombres, esta cifra desciende hasta el 44,3% en las mujeres. Una situación que si se analiza país a país se repite en todas las regiones salvo en Dinamarca, donde un 88,3% de los varones realiza actividad física al menos una vez por semana frente a un 90,4% de las mujeres, e Islandia, donde ellas son más activas que ellos.
Esta situación no se observa en España, donde el porcentaje de chicos que practican deporte es de un 60,8%, mientras que en el caso de las chicas es de un 44%. Ellas están por debajo de la media europea, mientras que ellos superan ese promedio en 3 puntos porcentuales. Estas cifras ponen de manifiesto el retraso que ha habido en la incorporación de la mujer a los centros de entrenamiento o el deporte federado, al igual que la falta de oferta en las instalaciones deportivas de clases y actividades específicas para ellas, que empezó a popularizarse a principios del siglo XX.
Otro de los segmentos en los que el sector deportivo puede encontrar un gran potencial de crecimiento es si se tiene en cuenta la franja de edad. La media europea de práctica deportiva semanal en los mayores de 65 años está en el 34,9%, siendo especialmente baja en países similares a España en cuanto a población, como Italia, con una adopción del 14% de este público, Bélgica y Portugal (con en torno al 11%) o Grecia (6,7%).
Francia y España también presentan cifras por debajo de la media, pero ambas por encima del 29%. En el caso de España, los gimnasios perdieron un 20% de sus abonados mayores de 60 años tras la pandemia, según un informe de Fitness Data Center. Recuperar a esta franja de edad es una asignatura pendiente para el sector, que sitúa en este perfil de público un tipo de cliente interesante tanto por poder adquisitivo como por volumen, especialmente en un contexto de creciente envejecimiento de la población.
En el caso de los más jóvenes, la franja de edad entre los 18 y los 29, la media europea mejoró entre 2014 y 2019 hasta alcanzar una tasa de práctica deportiva semanal del 76,4%. Lo mismo sucedió con los jóvenes españoles: mientras en 2014 eran un 70,5% los que realizaban actividad física, en 2019 ya suponían un 79%. Sin embargo, nuevamente la diferencia entre los hombres y las mujeres en esta franja de edad es especialmente notable con un 94,8% de los varones haciendo deporte frente a un 69% de las mujeres.