La música de la innovación en el deporte le suena muy bien a Casfid. Este grupo tecnológico comenzó a implantar sus productos de cashless y control de aforo en los grandes festivales que inundaban de groupies España cada verano en la era preCovid. Sin embargo, hace un par de años vieron el filón del deporte como una potencial nueva vertical de su business plan y crearon la marca IDSports. Comenzaron con eventos puntuales, como el Gran Premio de la Comunitat Valencia de MotoGP y la Final Four de la Euroliga de Vitoria-Gasteiz (2019). Su pago cashless comenzaron a utilizarlo el Cádiz CF y el CD Castellón, pero llegó la Covid-19 y todo se congeló. A pesar de ello, con la vuelta del público y los eventos deportivos, prevén triplicar la facturación y superar los 1,5 millones de euros en 2022.

Su negocio es escalable a casi todos los deportes y perfiles de clubes. “El objetivo es que IDSports acabe copando el 40% del negocio del grupo, porque los deportes siempre van a más y es una industria desestacionalizada”, adelanta su consejero delegado, Joaquín Costa, a 2Playbook.

Con el cierre de los estadios, IDSports tuvo que dejar en stand by buena parte de los controles que tenía por firmar, lo que le supuso un ajuste del 20% en sus previsiones de 2020, que apuntaban a una facturación de 250.000 euros. “Para este año, el objetivo es doblar y llegar al medio millón de euros”, asevera Costa.

La compañía aspira a que la vertical de eventos deportivos cope a medio plazo el 40% del negocio del grupo, que también opera en otros sectores como la música, los congresos y la automoción

La ralentización de su plan de crecimiento no intimida al máximo directivo de IDSports: “Tengo claro que esta tecnología ha llegado para quedarse”, explica. El crecimiento de la start up pasa también por salir de España. “Antes de la Covid teníamos abiertas conversaciones con varios clubs de la Premier League y de la liga portuguesa de fútbol; queremos retomar este plan en los próximos meses de cara a la siguiente temporada”, avanza el ejecutivo. El mercado latinoamericano también es otro objetivo prioritario en su plan de internacionalización.

Actualmente, Casfid, radicada en Valencia, cuenta con 35 personas en una plantilla que trabaja en conexión con el resto de departamentos y marcas. Además del deporte y festivales, la start up ofrece sus servicios al sector MICE (congresos y ferias) y el de la automoción.

Trazabilidad para controlar el aforo

Entre sus servicios principales, la trazabilidad y precisión en el control de aforo es uno de los más demandados por el deporte en estos meses post-Covid. Tienen la experiencia de haber probado este método antes de la pandemia: “En Cheste (MotoGP), por ejemplo, teníamos un QR que en segundos especificaba al controlador de acceso la fila y lugar exacto en el que tenía la localidad el aficionado. Sin necesidad de tener conexión a internet. En una simple pulsera puedes tener toda la información, agilizar el paso, ahorrarte problemas de gente que se cuele donde no debe, etc

Además de a clubes y promotores deportivos, Casfid trabaja también con las federaciones, cada vez más profesionalizadas. Con la de hockey y la de natación viene trabajando hace años. “Con la Rfen estuvimos en los campeonatos de España. Con el código (QR) controlamos quién entraba a la piscina, y sin ese check nadie podía acceder”, apunta Costa.

El siguiente reto de la compañía llegará el próximo verano, con los campus de niños que se esperan realizar en toda España. “Ayudaremos a que los monitores sepan con exactitud dónde está cada niño, facilitará el crear burbujas y grupos bien definidos, a controlar quién ha estado con quién si un niño da positivo y hasta podremos especificar qué alergias tienen los niños, que muchas veces no dicen nada y luego hay problemas con la comida…”, apostilla Costa.