Queda aún mucho por hacer, pero el boom del fútbol femenino no lo para ni una pandemia mundial. Todavía no se producen traspasos millonarios pero la crisis provocada por la Covid-19 no impidió que ellas rompieran la barrera de los 1.000 fichajes en 2020, un año complicado en el que casi se duplicó la inversión por la firma de jugadoras: 1,2 millones de dólares (990.000 euros) se movieron en traspasos, según el informe Global Transfer Market, elaborado por la Fifa.
En clave nacional, cabe destacar que España fue el país que más incorporaciones realizó, hasta 133, doblando al resto de ligas en fichajes de futbolistas. Además, el tercer traspaso más alto del año tuvo como protagonista a un club de la Primera Iberdrola. El EDF Logroño vendió en enero de 2020 a la jugadora zambiana Barbra Banda al Shanghai Women’s FC de la Superliga china. Se desconoce el importe del traspaso, pero la Fifa destaca que el top-5 de traspasos copó el 75% del volumen de negocio por transferencias.
En el notable incremento de la inversión en fichajes hay una futbolista que destaca sobre encima del resto. La danesa Pernille Harder se convirtió el pasado verano en el traspaso más alto de la historia del fútbol femenino gracias al Chelsea FC, que apostó fuerte por ella pagando 350.000 euros al Wolfsburgo alemán, semifinalista de la última Champions League. Su traspaso representó el 35% del volumen total del mercado de fichajes en todo el año.
Realizando una sencilla ecuación, si el 75% del importe total da como resultado 900.000 dólares, y el fichaje de Harder alcanzó los 425.000 dólares, se puede deducir que el club riojano ingresó en torno a 100.000 euros por la venta de Banda.
Otro club chino, el Wuhan Jiangda Women’s FC, y otra futbolista africana, la malauí Temwa Chawinga, copan el podio. La cuarta posición fue para la australiana Ellie Carpenter, firmada por el intratable Olympique de Lyon -ha ganado las últimas cinco Champions de forma consecutiva-, y la quinta para la francesa Valérie Gauvin, traspasada al Everton FC.
Esta radiografía del mercado de fichajes mundial en 2020 evidencia dos claves: la primera, que la Superliga china y la Premier League son los grandes animadores del fútbol femenino por la zona alta; y la segunda, que, aunque la Primera Iberdrola está en constante crecimiento, los clubes de España aún necesitan fichar fuera para ser competitivos.
Tres clubes españoles, en el ‘top-10’ con más altas
Otra clave para entender el perfil comprador de España en el fútbol femenino es que hasta tres clubes se situaron en el top-10 de equipos con más altas firmadas en 2020. Una lista en la que el primero es una franquicia de la NWSL (la liga norteamericana de fútbol) que fue adquirido por el Olympique de Lyon a finales de 2019. Por ello, el OL Reign (Tacoma, Washington) firmó hasta a 13 futbolistas -entre ellas, la española Celia Jiménez- e incorporó al entrenador francés Francis Benstiti.
El Atlético de Madrid, actual campeón de la Primera Iberdrola, se situó en el quinto puesto con once fichajes, uno más que el UD Granadilla Tenerife y el Zaragoza CFF. Sólo Estados Unidos cuenta con tres equipos en la lista: OL Reign, North Carolina Courage y Orlando Pride.
El fútbol de EEUU fue el que más talento aportó a España, con 22 traspasos; por detrás, Colombia (12) y Francia (9)
Otra coincidencia entre Estados Unidos y España se encuentra en que el fútbol estadounidense fue el que más talento aportó a la liga española, con 22 traspasos, el segundo puente aéreo más utilizado del mercado, sólo por detrás del de Australia-EEUU (32). Colombia fue el segundo país más atractivo para el fútbol español (12) y Francia el tercero, con nueve incorporaciones provenientes de tierras galas.
Por número total de transferencias, las futbolistas nacidas en Estados Unidos y Brasil fueron las que más traspasos protagonizaron, con 218 y 78, respectivamente. España se situó en décimos lugar, con 22 españolas cambiando de aires. De la liga española marcharon en 2020 hasta 60 futbolistas.
El gran agujero: el 70% tiene contratos que no superan los 12 meses
Todo lo avanzado en materia de inversión y fichajes se topa con un muro de grandes dimensiones cuando se bucea sobre la calidad de los contratos de las futbolistas. Son mayoría las jugadoras que tienen contratos de entre 6 y 12 meses (40%), a las que se suman un 33% que ha de renegociar sus contratos semestralmente. Sólo un 6,5% cuenta con contratos superiores a dos años.
La cifra cae al 0,5% entre las que están aseguradas por contrato por más de tres temporadas. Un grandísimo agujero negro que imposibilita a las futbolistas contar con la tranquilidad suficiente para poder desarrollar su carrera y no estar alerta cada temporada para renovar o salir en busca de nuevas y mejores oportunidades.
Esta situación genera que el 96,5% de las transferencias se hicieron sobre futbolistas que quedaron libres, dejando cero euros en las arcas de los clubes. A pesar de ello, creció hasta 36 los traspasos de futbolistas previo pago, cuatro más que en 2019. Sin embargo, la media de dinero que movieron las ventas cayó de los 14.000 dólares (11.500 euros) de media de 2019 a los 11.000 dólares (9.000 euros) de media del pasado año.