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Las estaciones españolas de esquí aumentan un 3,4% sus inversiones para 2020-201, hasta 37 millones

Los recintos de nieve facturaron 118,75 millones de euros en 2019-2020, un 2,7% menos interanual, a causa del cierre prematuro de la temporada por la Covid-19. El empleo directo creció hasta las 3.108 personas.

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Las estaciones de esquí ven más blanca que negra la temporada de nieve 2020-2021. Los complejos para la práctica de deportes de invierno afrontan una incierta camapaña a causa de la Covid-19 pero lo hacen reforzando su plan de inversiones: 37,5 millones de euros y un 3,4% más que el año anterior, según datos de la Asociación Turística de Estaciones de Esquí y Montaña (Atudem). La inversión ha aumentado en diez millones de euros en sólo dos años.

El incremento de la partida de inversiones de las estaciones es una apuesta “decidida” de la industria de la nieve en España por “continuar siendo un gran motor económico para muchas regiones y localidades”, según ha explicado Javier Villar, director general de Madrid SnowZone.

La partida de gastos que más crece para esta temporada es la de las pistas, en las que se invertirá 14,9 millones de euros, un 43% más que el pasado año y tres veces más que en 2019.

A causa de la pandemia, las estaciones se vieron obligadas a cerrar prematuramente el pasado marzo, con un total de 96 días de apertura, lo que supuso una caída en la facturación del 2,7% interanual, hasta 118,75 millones de euros. También se vio impactado el número de visitantes que acudieron a los recintos de montaña, que alcanzó los 4,8 millones de personas, un 15% menos que en 2018-2019. La facturación media fue de 24,7 euros, un 8% más interanual.

Para esta campaña, el presidente de Atudem, Jesús Ibáñez, ha lanzado un mensaje de confianza: “El mejor sitio al que puede ir uno este invierno es a una estación de esquí”. “A España viene mucha gente de Portugal, Polonia… pero podemos atraer más. Tiene que ser un objetivo estratégico como país la apuesta fuerte por el turismo de montaña”, ha destacado el dirigente.

“Si una estación de esquí estornuda, el sector se resfría. Debemos realizar un corredor seguro para que la gente acuda a las estaciones”, ha agregado Ibáñez. En ese objetivo también entra mantener los más de 3.000 empleos directos que ofrece la industria de la nieve. En concreto, el número de profesionales que trabajan en las estaciones de esquí españolas aumentó la pasada temporada hasta sumar 3.108 puestos de trabajo, un 2% más interanual.

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