DraftKings acelera su negocio a través de la diversificación. Tras entrar en las apuestas tras su regularización masiva en Estados Unidos, la compañía ha pivotado también hacia los NFTs y otros activos digitales. A cierre de los tres primeros meses de 2022 su facturación se ha disparado un 34%, hasta 312 millones de dólares (295 millones de euros).
Sus pérdidas, sin embargo, han empeorado exactamente al mismo ritmo, y en el primer trimestre de 2022 se situaron en 467,7 millones de dólares (442,4 millones de euros). Es decir, el grupo tiene más pérdidas que ingresos en la actualidad, fruto de las compraventas realizadas y la ofensiva para expandir su negocio.
“Hemos crecido en todos nuestros segmentos clave y no vemos impacto de la presión que la inflación está poniendo sobre los consumidores”, ha destacado Jason Robins, cofundador y consejero delegado. “Seguimos aumentando nuestra oferta y reteniendo consumidores a medida que se aprueban nuevas jurisdicciones”, ha añadido.
DraftKings asegura haber superado ya los dos millones de usuarios activos de pago, un 29% más que en el mismo período del año anterior. El ingreso medio por usuario único mensual, una métrica denominada Arpmup (por sus siglas en inglés); fue de 67 dólares, un 11% más. De cara a 2022, DrafKings ha revisado sus previsiones al alza y espera facturar entre 1.850 millones y 2.000 millones de dólares (1750 millones y 1.892 millones de euros).