El baloncesto 3x3 siempre ha sido una de las modalidades con más tirón en el deporte de la canasta. Sus orígenes estaban directamente vinculados a las canchas callejeras, lejos del entorno profesional. Comenzó a emerger como disciplina organizada en 2007, cuando el Comité Olímpico Internacional (COI) pidió a las federaciones ideas sobre nuevas modalidades que conectaran con nuevas generaciones. Quince años después, proyectos como el Plaza 3x3 de CaixaBank y la FEB han sido algunos de los motores que han llevado a que la disciplina ya tenga su sitio en los Juegos y sea un negocio de más de 30 millones de euros anuales para la Fiba.
“Cuando empezamos el World Tour en 2012 ya nace como una competición para jugadores profesionales. Ahí ya estábamos obsesionados con aumentar los premios porque era la única forma de atraer mejores jugadores. Al principio venían jugadores amateurs, o retirados, u otros que venían casi de vacaciones tras hacer su temporada regular. Ahora no tiene nada que ver, todos son profesionales y muchos se dedican exclusivamente a esta modalidad”, indica desde el cuartel general en Barcelona de Fiba 3x3 su director general Álex Sánchez, en el marco de la serie Baloncesto y negocio: las claves de dos décadas de éxitos, elaborado por 2Playbook con el apoyo de CaixaBank.
El COI aceptó el 3x3 para los Juegos Olímpicos de la Juventud de 2010 por “su imagen joven, urbana y positiva, así como su universalidad y la limitada infraestructura y equipo para jugar”, se indicó entonces. El organismo también recalcó que se identificó esta modalidad como “un catalizador potencial para el desarrollo del baloncesto en todo el mundo”, en un contexto en el que aún no era tan evidente que hacían falta modelos competitivos más adaptados a los hábitos de consumo de las nuevas generaciones.
Desde entonces la Fiba se centró en crear su circuito mundial e impulsar la disciplina a nivel competitivo. Hoy es un vertical independiente dentro de la propia federación y su evolución ha sido tan rápida en apenas una década que, antes de la pandemia, ya aportaba casi el 20% de los ingresos totales de Fiba.
La federación internacional actualiza sus cuentas en ciclos de cuatro años, por lo que habrá que esperar al informe del ciclo 2019-2023 para conocer la evolución de los ingresos del 3x3 a nivel global. A cierre de 2019 su facturación fue de 152,4 millones de francos suizos (154,3 millones de euros), por lo que el 3x3 aportaría en torno a 30,4 millones de francos suizos, según se recoge en sus estados financieros.
En España, CaixaBank fue de las primeras marcas en ver el potencial que tenía esta forma de juego, más urbana y dinámica, con tiempos de duración más cortos que encaja mejor con el tipo de consumo que hoy buscan los jóvenes. La primera edición del circuito amateur Plaza 3x3 CaixaBank se puso en marcha en 2012, cuando la modalidad aún estaba muy lejos de dar el salto como deporte olímpico oficial, algo que lograría en Tokio 2020.
"La FEB fue una de las primeras federaciones nacionales que apostó, de la mano de la Fiba, por impulsar y desarrollar el baloncesto 3x3 como proyección de futuro de nuestro deporte. Y desde entonces hemos ido construyendo una estructura cada vez más sólida, empezando por las Selecciones Nacionales en competiciones oficiales de todas las categorías, circuitos de participación como el Plaza 3x3 CaixaBank y desde esta temporada con los primeros Campeonatos de España de Selecciones Autonómicas y Clubs de la historia. El crecimiento del 3x3 es una de las grandes prioridades de nuestra gestión", explica a 2Playbook su presidente, Jorge Garbajosa.
“El objetivo es acercar el baloncesto al territorio para que todas las personas de cualquier edad, niños, niñas y jóvenes puedan acceder a un deporte con el que compartimos valores como el esfuerzo, la capacidad de trabajo, colaboración y espíritu de equipo. El Plaza 3x3 CaixaBank se enmarca en el Programa Universo Mujer Baloncesto, que cuenta con el respaldo del banco desde hace más de diez años. Porque, además, a través de la mayor red de oficinas del sector repartida por todo el país, CaixaBank mantiene una estrecha vinculación con el territorio y cuenta con una vocación de entidad cercana con el cliente, que se traduce en patrocinios con vinculación deportiva y social”, asegura María Luisa Martínez Gistau, Directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de CaixaBank.
La iniciativa de la entidad financiera, de la mano de la Federación Española de Baloncesto (FEB), es un caso de éxito dentro del patrocinio deportivo. Se trata de un ejemplo de cómo una marca puede involucrarse más allá de la visibilidad para desarrollar un proyecto propio que ha ayudado a sentar las bases de una disciplina en España.
Por el circuito Plaza 3x3 CaixaBank, el mayor circuito de baloncesto 3x3 en la calle que se disputa desde el año 2012, han pasado más de 50.000 jugadores de todas las edades y ha recibido a más de 300.000 visitantes tras recorrer 43 ciudades españolas a lo largo de sus diez años de historia.
De hecho, es uno de los pocos campeonatos que ha nacido bajo la iniciativa de un patrocinador. Desde 2012 ha pasado ya por 43 ciudades, y este año hará parada en Vigo, Córdoba, Toledo, Madrid, Pamplona, Logroño, Barcelona, Santander y Murcia. Se celebra en escenarios emblemáticos de las ciudades, ganando atractivo visual y acercándose a la población.
Para Sánchez, utilizar esos escenarios es una de las claves del circuito profesional de la Fiba: “En Japón jugamos dentro de un templo, como si fuera El Vaticano. En Praga jugamos en el punto más céntrico de la ciudad, donde empiezan todos los tours turísticos. Si tuviéramos que poner un equivalente a dónde jugar en Madrid o Barcelona, sería la Plaza de Colón o la Plaza de la Catedral”.
El interés por esta modalidad dentro de la canasta es creciente. En paralelo al Plaza 3x3 CaixaBank se ha constituido el Herbalife 3x3 Series, la competición de alto nivel de la FEB que da acceso a las competiciones internacionales. Equipos como el Bàsquet Girona de Marc Gasol o Valencia Basket han creado una sección propia y otros, como Gipuzkoa Basket, empiezan a tantearlo a través de convenios de colaboración con equipos especializados en esta modalidad.
"Las Herbalife 3x3 Series fueron el primer campeonato oficial y van ya por su cuarta temporada. Es una competición, una liga más de la pirámide de competiciones FEB, no sólo con premios para finalistas y campeones sino también con puntuación en los rankings oficiales y plataforma de acceso a campeonatos internacionales", explica Garbajosa. "En el circuito Plaza 3x3 CaixaBank también se compite, pero su objetivo principal es la participación, la práctica del baloncesto en su vertiente lúdica. Son dos formatos perfectamente compatibles, que además están resultado un éxito".
Y esa es otra de las claves que ha impulsado al básquet 3x3. Fiba y el resto de federaciones han sabido crear un producto diferente y complementario al baloncesto tradicional en el que no compite una disciplina con otra. De hecho, el 3x3 se posiciona como un deporte urbano, y compite por la atención de nuevas generaciones y otro público distinto al que paga habitualmente un abono para asistir al pabellón.
Prueba de ello es que el Plaza 3x3 CaixaBank se ha celebrado en el marco de las Urban World Series en sus paradas de Madrid y Barcelona. Se trata de un evento que aglutina diferentes deportes urbanos, en el que algunas de las pruebas incluso puntúan para la clasificación olímpica o mundiales. La propia Fiba busca tocar esa tecla al integrar competiciones de freestyle, breakdance y otras actividades de ocio vinculadas a la cultura urbana. Es la llave para conectar con nuevas generaciones a través de otros canales sin canibalizar el producto principal.
España, de hecho, ya ha dado un paso más y en agosto acogerá por primera vez una parada del circuito internacional femenino de 3x3. Lo hará en Melilla, y Garbajosa asegura que "es el primer paso, y por supuesto tenemos la intención de acoger también torneos masculinos, un proyecto que iremos concretando en los próximos meses".