A la espera de conocerse el fallo definitivo de la Superliga, el abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (Tjue) vuelve a dar una opinión favorable en otro caso relacionado con sus normativas. Maciej Szpunar ha encontrado “incoherente” la petición del Royal Antwerp belga ante la negativa de Uefa y la Federación de Fútbol de Bélgica de incluir como canteranos a jóvenes futbolistas fichados de otros equipos de su misma liga. ¿El objetivo? Cumplir con los cuatro jugadores formados en la base dentro de su plantilla que exige la Uefa desde 2008-2009.
En concreto, los equipos profesionales han de contar con, al menos, ocho jugadores que hayan sido formados por un club de la misma federación tres años entre los 15 años y los 21 años. De ellos, la mitad han de ser canteranos del club. Al respecto, el Royal Antwerp, de Amberes y propiedad del multimillonario Paul Ghesteyns, junto a un futbolista profesional belga denuncian que las normas restringen su libertad de fichar, con una demanda que se asemeja a la del famoso caso Bosman.
Szpunar, en su escrito, reconoce que la Uefa ha de trabajar para que la normativa no cree una discriminación indirecta contra los jóvenes futbolistas de otros países de la Unión Europea, entendiendo que la nacionalidad puede colocar a unos jugadores con una posición de ventaja sobre otros sólo por su lugar de origen. Sin embargo, apunta que ampliar la norma, de jugadores de la cantera a jugadores de la misma liga, “frustraría el objetivo de que el club forme a jugadores jóvenes”.
La Uefa ha acogido “con satisfacción” las conclusiones del abogado general del Tjue, que “respalda la importante misión social y deportiva de incentivar a los clubes de fútbol a invertir en la formación de jóvenes jugadores y mejorar el equilibrio competitivo en toda Europa”, ha apuntado en un comunicado. Asimismo, ha asegurado que “toma nota” de la recomendación de Szpunar de “mejorar la eficacia de las normas vigentes”.