El sector del deporte cierra 2020 con la cifra de paro más elevada de su historia: 55.000 afectados

La Encuesta de Población Activa (EPA) refleja un alza interanual del 41,8% de personas desempleadas en el sector deportivo, recreativo y de entretenimiento. Pese a que los afectados por Ertes son personas ocupadas, la tasa de ocupación ha caído un 10,7%.

Empleo deportivo

El sector deportivo cierra su peor año de la historia por el fuerte repunte del desempleo y la caída del número de personas activas. La Covid-19 se ha llevado por delante 16.200 empleos en un año la industria deportiva, recreativa y de entretenimiento, que abarca desde los profesionales de los centros y clubes deportivos, hasta el personal de los parques temáticos. Según se desprende de la Encuesta de Población Activa (EPA) realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), estos sectores cerraron 2020 con 55.000 personas desempleadas, un 41,8% más que el año anterior.

Es la cifra de paro más elevada desde que se tienen registros, superando los peores años de la crisis y el máximo alcanzado en el cuarto trimestre de 2013, cuando 54.300 trabajadores de este sector estuvieron sin trabajo y en búsqueda de empleo. Ya en 2020, la crisis sanitaria, el cierre de instalaciones deportivas y el cese de la actividad de los parques temáticos y clubes ha provocado que se alcancen las cifras de paro más elevadas de la historia en este sector.

El número de ocupados, es decir, de personas con trabajo, ha caído un 10,7% interanual, hasta 204.600, el peor cierre de año desde 2017 con la pérdida de 24.600 empleos. La buena noticia es que el número de ocupados ha mejorado respecto al segundo trimestre de 2020, cuando sólo 181.800 personas estaban empleadas en este sector. La mayoría de negocios del sector deportivo estuvieron cerrados entre abril y junio, ya que el Gobierno decretó el cierre de instalaciones deportivas.

El número sería mucho mayor de no ser por los expedientes de regulación temporal de empleo, un mecanismo facilitado por el Gobierno para cubrir parcialmente el sueldo de las personas que no han podido trabajar por las limitaciones de la actividad para frenar el avance del virus. Los afectados por los Ertes contabilizan como personas ocupadas, en tanto que conservan su trabajo. Evitar que los Ertes se transformen en Expedientes de Regulación de Empleo (EREs) es fundamental para impedir que la cola del paro continúe creciendo.

En cuanto al número de personas activas, es decir, aquellas con 16 o más años que tienen trabajo o, de no tenerlo, estaban en búsqueda de empleo, cayó un 3,1%, hasta 259.600 personas, según los datos facilitados por el INE. Es el peor cierre de año desde 2018.

 

¿Afecta el desempleo a hombres y mujeres por igual?

El roto del empleo por la Covid-19 ha afectado a mujeres y a hombres, pero el alza del paro ha sido más pronunciada entre ellas. Sin ir más lejos, en un año la cola del paro de mujeres de este sector ha crecido un 71,5%, hasta 22.300 españolas, 9.300 más que hace un año. El paro masculino se ha elevado un 28,4%, hasta 33.000 varones, 7.300 hombres más que a cierre de 2019.

En cuanto a la cifra de personas con empleo, ellos ocupan 125.600 puestos de trabajo, un 11,2% menos que hace un año, por la caída del 10% entre ellas, que fueron 79.000 mujeres las que finalizaron 2020 con trabajo. El número de españoles con trabajo en el sector deportivo y recreativo ha caído en 15.900 personas en un año, mientras que el número de ocupadas ha caído en 8.800 personas.

La redacción propone