VivaGym continúa sufriendo los efectos de la pandemia en su negocio. El grupo, que opera con las cadenas de gimnasios VivaGym en España y Fitness Hut en Portugal, cerró 2021 con unas pérdidas de 42,4 millones de euros, un 2,7% menos que en 2020, según las cuentas anuales de la matriz domiciliada en Reino Unido, a las que ha accedido 2Playbook. La gestora de instalaciones recortó ligeramente sus números rojos, pese a que la facturación retrocedió un 7,8%, hasta un total de 49,7 millones de euros en 2021.
El 93% de los ingresos procedieron de las cuotas de los socios, mientras que 2,6 millones se generaron a través de otros ingresos. El pago de matrículas de inscripción generó 822.994 euros. Sin contar las amortizaciones (casi 30 millones de euros, en línea con el año anterior), los alquileres y otros gastos financieros, la compañía cerró el año con un ebitda ajustado de 5,9 millones de euros, según la formulación de cuentas elaborada bajo la normativa contable Ifrs.
La compañía negoció descuentos y exenciones de pago de alquileres por 6,6 millones de euros, lo que redujo hasta 241,2 millones de euros el capital comprometido a largo plazo con los propietarios de los locales. De este importe, la empresa debía hacer frente a pagos de alquiler por 11,2 millones de euros a lo largo de 2022.
Pero si la compañía pudo operar con una certeza, esta fue el apoyo de sus accionistas y socios financieros. De las cuentas se desprende que la compañía recibió 10 millones de euros de sus accionistas, 7,7 millones aportados por Bridges Fund Management, el fondo propietario de la compañía, a través de seis ampliaciones de capital que aliviaron las tensiones de tesorería.
VivaGym redujo sus ventas un 7,7% en 2021, hasta 49,7 millones de euros
Ares Management, que desde 2021 es el segundo máximo accionista del Atlético de Madrid, siguió aportando financiación a la cadena de gimnasios, como ha venido haciendo en los últimos años en los que la compañía ha adquirido la cadena lusa Fitness Hut y la española Duet Fit. En total, la deuda con Ares asciende a 122,7 millones de euros con vencimiento en enero de 2025 y 2026; son 20,5 millones de euros más que el año pasado, debido a que el fondo ha aceptado convertir los intereses en deuda principal (payment in king, PIK, o préstamo satisfecho con una nueva emisión de deuda).
Así, se otorgaba mayor flexibilidad financiera a VivaGym, evitando que hiciera frente al pago de intereses en un momento en que la compañía aún estaba operando con las restricciones de la pandemia, como el límite de aforos o el uso obligatorio de mascarilla en los centros. Todo ello prorrogó los plazos de recuperación del sector de los gimnasios, que no empezaron a recuperar clientes hasta el segundo trimestre de 2021 y, tras la habitual caída de abonados en verano, mejoraron sus cifras a finales del año.
La compañía abonó 25,3 millones de euros por intereses financieros, resultado de los intereses por la deuda bancaria (13 millones) y de los intereses del leasing por el equipamiento de sus gimnasios (12 millones de euros).
En cuanto a la estructura de costes, VivaGym destinó 18,3 millones de euros al pago de nóminas de una plantilla que, de media, estuvo compuesta por 1.029 trabajadores en 2021. En la actualidad, la compañía ultima la apertura de un club en Cuzco, en el distrito financiero de Madrid, que será su instalación número 100 en la Península Ibérica. De cara a 2023, el objetivo es poner en marcha veinte gimnasios con el objetivo de alcanzar los 400.000 socios en total.
VivaGym refuerza su estructura
La cadena ha incorporado a Jaime Olazabal, procedente de Mastercard, como director de desarrollo de negocio y chief of staff. Así, ha asumido la función de responsable de la oficina desde la que trabaja el consejero delegado de Fitness Hut, la cadena lusa que el grupo español adquirió en 2018.
Además, recientemente ha fichado a la Theresa Zabell, única deportista española con dos medallas de oro olímpicas. Zabell puso en marcha hace 23 años la Fundación Ecomar, preside la Asociación Española de Mujer, Ejecutivas y Deporte (Aemed) y en Viva Gym cumple la función de asesora independiente para los temas relacionados con el liderazgo, la cultura de empresa y la responsabilidad social corporativa (RSC).