Viding Fitness da continuidad a la política de adquisiciones con la que ha acelerado su expansión en los últimos años. El grupo de instalaciones deportivas ha cerrado la compra de Centros de Fitness Illes, que le permitirán sumar seis gimnasios en Palma de Mallorca. Los términos económicos de la operación no se han hecho públicos.
“Es una fantástica noticia que refuerza nuestra estrategia de crecimiento y expansión sostenible. Con esta adquisición, Viding entra con fuerza en las Islas Baleares donde, hasta la fecha, no teníamos presencia”, ha comentado Álvaro Gumuzio, director de marketing de la compañía, en un comunicado.
En esta nueva etapa, Naty Company seguirá al frente de las operaciones en Baleares, después de liderar una cadena que cuenta con más de 32 años de historia en la isla. “Estar en Viding nos garantiza los estándares de calidad que siempre hemos buscado, el poder seguir evolucionando tecnológicamente, y con el mejor equipo humano”, ha argumentado la directiva.
A falta de datos actualizados, la compañía ya superaba los 21 millones de euros de facturación y contaba con más de 39.500 socios en 2019. Eso sí, entonces sólo sumaba cinco complejos, a los que ahora sumará los seis adquiridos en Baleares y los tres que tiene en planificación para los próximos meses. Es decir, que en 2022 tendrá una red de 14 clubes.
El plan de expansión trazado por la compañía también incluye la apertura de un centro deportivo en Salamanca antes del verano, mientras que en otoño arrancará las obras de Viding Castellana, uno de sus principales proyectos para Madrid. También ha firmado un acuerdo para construir un club en Valladolid sobre una parcela de 18.000 metros cuadradros, con una zona exterior de 15.000 metros destinada a piscinas y actividades outdoor.
"El grupo Viding Fitness tiene una clara visión de crecimiento y expansión, invirtiendo en infraestructuras, mejorando las instalaciones y equipamiento tecnológico y manteniendo los estándares de calidad del servicio que presta", explican en un comunicado.
En cuanto a la estrategia de crecimiento, esta no es la primera vez que la compañía recurre a las adquisiciones para su expansión. Sus inicios se remontan a 2013 con la apertura de un centro en Sevilla (Viding La Rosaleda). En diciembre de 2016 abrió sus puertas Viding Alcántara, en Madrid, y poco más de medio año después, en julio de 2017, abrió en Tarragona aprovechando una de las instalaciones de los Juegos Mediterráneos.
Ya en 2018 entró la política de adquisiciones con la compra de Viding Piscinas Sevilla en julio de 2018, a la que en febrero de 2020 continuó con la adquisición de Ekke en Lleida.