La Covid-19 ha dejado en stand by la actividad de las cadenas de gimnasios por partida doble en 2020. Lo hizo en marzo, cuando las cadenas tuvieron que interrumpir su actividad, y lo ha vuelto a hacer en la segunda ola. Basic-Fit, gigante europeo del fitness, ha sido una de las compañías más afectadas, y para medir la dimensión del roto por la pandemia se ha puesto en manos de nueve analistas para conocer el diagnóstico: la compañía perderá al menos 47,2 millones de euros en 2020, un importe se eleva hasta 89,7 millones de euros en el escenario más pesimista. El tercer escenario, a caballo entre el pesimismo y el optimismo, cifra en 67,1 millones de euros las pérdidas en 2020.
El resultado neto subyacente, resultado de aplicar la norma contable Ifrs 16, que afecta a la contabilización de los ingresos, refleja que en el escenario optimista la compañía podría llegar a ganar 31,2 millones en el año del Covid-19. Pero, en el pesimista, las pérdidas pueden llegar a ser de 83,7 millones de euros. La previsión media de los nueve analistas es que el resultado podría ser negativo en 12 millones en 2020.
Sin tener en cuenta el Ifrs 16, los impuestos y las permutas financieras, es decir, tomando como referencia el resultado neto contable previsto, Basic-Fit cerraría su peor año desde 2016, cuando sufrió unas pérdidas de 32,4 millones de euros. Doce meses después entró en beneficios, situación que no ha abandonado hasta el estallido de la crisis de la Covid-19. De hecho, entre 2017 y 2019 su resultado neto fue en aumento año a año, hasta ganar 21,1 millones de euros en el último ejercicio.
El problema de la pandemia es que sus efectos podrían extenderse hasta 2021, en función de cuándo se lleve a cabo la campaña de vacunación y se recupere la confianza los clientes. En el peor de los casos, Basic-Fit podría llegar a perder 118 millones de euros en 2020 y 2021, según la previsión más agorera de los analistas, que estima en 28,5 millones de euros los números rojos durante el próximo año. En el mejor de los casos, podría llegar a ganar 41,7 millones de euros, aunque los expertos estiman que lo más probable es que el beneficio en 2021 sea de 16 millones de euros.
Estas previsiones se han definido en función de la estimación de ventas durante este año y el próximo. El informe detalla que los ingresos de Basic-Fit en 2020 podrían estar en torno a 441 millones de euros, un 16,8% menos que en el año anterior. En el mejor de los casos, las ventas caerían un 9,8%, hasta 468,8 millones de euros, mientras que el escenario más pesimista sitúa la caída del negocio en un 23,4% interanual, hasta 417,5 millones.
La dirección se encomienda a sus operaciones en la zona del Benelux, puesto que su principal mercado, Francia, ha visto como ha decretado el cierre de gimnasios durante todo noviembre, mientras que en España continúan abiertos, aunque con limitaciones. La compañía espera que su plataforma de entrenamiento online contribuya a fidelizar a los clientes y a monetizar los entrenamientos para mitigar el impacto de la Covid-19.
Pero, ¿con qué previsión de ventas encara Basic-Fit el próximo año? El documento espera récord de ingresos, dejando atrás los 515,2 millones de euros que se facturaron en 2019, año pre-Covid. Las estimaciones oscilan entre 656,3 millones de euros en el peor de los casos y 710,2 millones en el caso de que 2021 sea un buen año para la cadena holandesa. La media de los analistas lo sitúan en alrededor de 685 millones de euros la facturación estimada en 2021.
De confirmarse estas previsiones, 2021 sería un buen año para Basic-Fit en lo que concierne al volumen de negocio, mientras que el resultado de explotación (ebitda) rondaría los 345 millones de euros. El importe ascendería a 374 millones en el mejor de los casos, o caería a 308 millones en el contexto menos a halagüeño.
Las aperturas de gimnasios tienen un papel protagonista en estas previsiones, basadas en la capacidad de la compañía de ejecutar su ambicioso plan de expansión. A cierre del tercer trimestre de 2020, la empresa dirigida por René Moos operaba 902 centros deportivos en Holanda, Bélgica, Francia, España y Luxemburgo, y daba servicio a 2,25 millones de clientes.
En lo que va de año y pese a la pandemia, la compañía ha inaugurado 124 centros. Tiene 53 gimnasios en fase de construcción y un centenar de contratos firmados para abrir nuevos locales. “Los 53 clubes en fase de construcción abrirán durante el primer trimestre de 2021 salvo cinco, que lo harán este año”, explica Basic-Fit en sus resultados trimestrales. El centenar de contratos firmados se traducirán en nuevos gimnasios, aunque “su desarrollo dependerá del Covid-19”.
Además, la empresa está negociando con propietarios inmobiliarios para abrir otros 220 centros más, al tiempo que está en busca de ubicaciones. “Seguimos esperando alcanzar los 1.250 gimnasios en 2022”, afirma la compañía. Los analistas afirman que Basic-Fit finalizará 2020 con 2,3 millones de abonados como mínimo y de cara a 2021 estima alcanzar los 2,8 millones de clientes.
En cuanto a la deuda neta, la media de las previsiones de los nueve analistas apunta a que se cerrará 2020 con un apalancamiento de 431,8 millones de euros, un importe que esperan que aumente un 10% de cara a 2021 debido a la inversión en el plan de expansión de Basic-Fit.