La Covid-19 devuelve a Supera a niveles de negocio previos a la crisis económica y financiera de 2007. En un año en que la patronal española del fitness había anticipado que las cadenas de gimnasios podrían dejar de facturar un 53%, una de las mayores gestoras de instalaciones del país, Supera, cerró el año con esa caída en las ventas. La empresa gallega cerró el ejercicio con una cifra de negocio de 22,2 millones, que, sumados a los 940.000 euros procedentes de otros ingresos de explotación, le permitió ingresar un total de 23,2 millones de euros.
Así se desprende de la información extraída de 2Playbook Intelligence, la herramienta de inteligencia de mercado de 2Playbook. La afectación de la pandemia en el resultado neto fue determinando: la empresa cerró el año con unas pérdidas de 7,5 millones de euros, por el beneficio récord de 3,1 millones de euros que obtuvo en 2019, según consta en sus cuentas. La cadena, que en los últimos seis ejercicios ha encadenado beneficios, cerró su peor registro de pérdidas desde que se tienen datos.
El motivo fue la pandemia, que paralizó su actividad desde mediados de marzo hasta junio y ha provocado una fuerte caída en el número de abonados. La empresa no giró el recibo durante el parón de su actividad y compensó a sus abonados las dos semanas de marzo cobradas y no disfrutadas.
Prueba del impacto que la caída del número de abonados tuvo en sus cuentas es que en el segundo semestre facturó tanto como en el primero, a pesar de que Supera no cobró la cuota de abril y mayo, y compensó en junio lo cobrado en marzo. De hecho, la compañía pudo operar casi de manera ininterrumpida durante todo el segundo semestre (con la excepción de Castilla y León). Sin embargo, el descenso del número de clientes en verano y otoño no ayudó a mejorar la situación, a pesar de que octubre suele ser un momento en que las altas repuntan.
La buena noticia es que Supera ha sido rentable durante años, lo que le ha permitido crear un colchón de 21,8 millones de euros de reservas, acumuladas gracias a los beneficios de los años anteriores. Este importe apenas ha caído respecto al año anterior, cuando se situó en 22,4 millones.
Supera trabajó para mitigar el impacto de la Covid-19. Por un lado, ajustó sus costes y, por otro, tiró de financiación bancaria para aliviar las tensiones de tesorería. El gasto de personal cayó un 42,6%, hasta 11,4 millones de euros, gracias a que la empresa recurrió al mecanismo del expediente de regulación temporal de empleo (Erte). Por otro lado, el resto de gastos de explotación, que abarca desde arrendamientos y cánones hasta suministros, cayeron un 22,4%.
En cuanto a la deuda, los compromisos con bonistas aumentaron un 21,1%, hasta 69,6 millones de euros, la mayoría de ellos a largo plazo tras la refinanciación de los 55 millones que se emitieron en 2015. Buena parte de este importe irá destinado al plan de expansión en Portugal y España.
Los compromisos con la banca se han elevado un 81,4%, hasta 20,9 millones, de los cuales 16,9 millones son a largo plazo, por los 3,9 millones que deben devolverse en doce meses. La deuda con los bancos a corto plazo se elevó en 1,1 millones de euros, principalmente por los créditos ICO que pidió la compañía para refinanciar “pequeñas partidas” de deuda, afirman. De las cuentas no auditadas se desprende que la deuda financiera neta asciende a 93,1 millones de euros.
Ambicioso plan de aperturas en el mercado luso
En España y Portugal, Supera opera 31 instalaciones deportivas municipales y doce gimnasios Supera 24 Fitness, la marca que creó en 2015 para abrir centros de proximidad que operan durante todo el día. En 2020 también cerró dos clubes de esta marca en Madrid y Vigo al considerarlos no estratégicos, aunque no descarta crecer con esta firma en un futuro.
También lo hará con el modelo concesional en cuanto la pandemia lo permita. A la apertura en Rivas Vaciamadrid, en la que invirtió 13 millones de euros, y a la puesta en marcha de un club 24 horas en Valencia el pasado invierno le seguirán nuevos centros deportivos municipales en Portugal. Por un lado, en cuanto se levante el confinamiento en el país luso abrirá un club en Setúbal, en el que ha invertido ocho millones.
A este proyecto le seguirá otro club en Barreiro, también al sur del país vecino, donde invertirá siete millones de euros, y otra instalación en Oviedo, con 6 millones de euros más. En total, serán 21 millones de euros para crecer a lo largo de los próximos doce meses. Además de estos proyectos, se está avanzando “en los trámites de Braga, Oporto, Coimbra y Seixal”, que junto al segundo en Lisboa serán cinco aperturas más en el mercado luso, donde Supera tiene comprometidos más de cuarenta millones de euros.
una vez finalice estas obras contará con siete complejos en Portugal, aunque a largo plazo espera alcanzar los 17 gimnasios en ese país. De media la compañía invierte entre siete millones y nueve millones de euros en la construcción de cada centro, y espera generar un ebitda (resultado de explotación) de 1,2 millones de euros.