Reus busca operador para construir y gestionar el Centro Acuático y de Fitness de la ciudad. Este proyecto, que forma parte del Plan de Acción Municipal 2019-2023, saldrá próximamente a concurso y estará valorado en 82 millones de euros. De este importe, ocho millones se destinarán a la construcción del complejo, y los 74 millones restantes corresponden a los ingresos que generará este equipamiento durante todo el periodo de concesión.
Así lo ha anunciado el Ayuntamiento de Reus, que este viernes votará en el pleno el pliego de cláusulas para licitar la construcción y explotación de la instalación. Este nuevo centro que se construirá al lado del Pabellón Olímpico Municipal prevé, según el alcalde, Carles Pellicer, “dar respuesta a la falta de equipamiento deportivo en la zona sur y oeste de la ciudad”.
A cambio de este contrato, la empresa ganadora del concurso público abonará un canon anual de 10.000 euros, que se incrementará un 1% cada año. Desde el consistorio aseguran que el principal objetivo es “tener un edificio perfectamente en funcionamiento” al finalizar el contrato y no tanto la retribución económica, ya que “penalizar a la empresa repercutiría en el precio del usuario”.
La aportación máxima del Ayuntamiento para la realización de este proyecto será de 1,4 millones de euros. El pliego que el Gobierno municipal espera aprobar durante el pleno del viernes fija también el calendario a seguir: los tres primeros años desde la firma del contrato corresponderán a la redacción del proyecto y la construcción del mismo. Una vez finalizada la obra, el operador que se haya adjudicado su explotación dispondrá de 35 años para operarlo, hasta el año 2060.
La empresa adjudicataria deberá asumir la obra y, previamente, la redacción del proyecto básico y ejecutivo, que deberá ser aprobado por el Ayuntamiento. Una vez el centro esté construido, empezará a explotarlo, asumiendo todos las inversiones y gastos de mantenimiento durante todo el periodo de la concesión. Como será un contrato de gestión indirecta, la gestora facturará todo el negocio que genere la instalación.
El club contará con un conjunto de piscinas cubiertas y espacios complementarios para la práctica del deporte responde a un modelo de colaboración público-privada, y desde el Ayuntamiento consideran prioritario que las propuestas de los licitadores incluyan un programa social. Por este motivo, el consistorio anunció que también regulará los precios máximos de las diferentes cuotas disponibles en las instalaciones, según ha publicado Diari Més.
El nuevo complejo multidisciplinar tendrá más de 5.000 metros cuadrados construidos, y tendrá capacidad para dar servicio a 4.000 abonados. La idea inicial es que aparte de las piscinas, la zona termal y las salas de fitness y actividades deportivas dirigidas, el futuro equipamiento también cuente con espacios comerciales que complementen los servicios como una ludoteca infantil, consultas de fisioterapia, nutrición o cuidado personal, así como una cafetería, aunque los servicios concretos serán decididos por la empresa ganadora del concurso público.