El V convenio de las instalaciones deportivas y gimnasios podría ser una realidad antes del próximo verano. Empresarios y sindicatos han acercado posturas tras varios meses de negociaciones y han llegado a un preacuerdo en distintos puntos clave que ahora deberán ratificar las juntas directivas de las tres patronales que hay sentadas en la mesa de negociación: Fneid, la Asociación Española de Empresarios de Servicios Deportivos de las Administraciones Públicas (Aeesdap) y la Asociación Española de Campos de Golf (Aecg). Por la parte laboral participaron UGT y CCOO.
Si nada se tuerce en las próximas semanas, las negociaciones encararán su recta final más de tres años y medio después que los sindicatos denunciasen el IV convenio colectivo, un texto vigente desde su publicación en el Boletín Oficial del Estado en mayo de 2018. “Aún quedan por resolver algunos aspectos que no se han tratado de momento en la mesa, pero estamos muy cerca de cerrarlo todo”, coinciden varias de las partes presentes en la última reunión para tratar el convenio.
Pese a los “flecos pendientes de resolver” y a que ambas partes se muestran cautas, patronales y sindicatos celebran los avances que se han producido a lo largo de esta primavera, y que han servido para desbloquear una negociación que se demoró y complicó tras el estallido de la pandemia y la posterior crisis energética, por el impacto económico que ambos fenómenos han tenido en los centros deportivos.
2Playbook ha tenido acceso a algunos de los detalles que se discutieron, entre ellos, el borrador con la actualización de las tablas salariales para 2023, 2024 y 2025, que ha sido el principal caballo de batalla. De entrada, la propuesta para el año en curso contempla subidas que varían en función de la categoría. ¿El motivo? Volver a establecer diferencias entre los diferentes niveles profesionales, ya que el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha provocado que, en 2023, el salario mínimo en España ya esté por encima de los salarios previstos para cuatro de los cinco grupos profesionales en el IV convenio colectivo.
Es decir, se equiparaba el mínimo en tablas en dichos grupos, sin establecer una diferenciación que, con el nuevo convenio, sí se quiere implantar. La nueva propuesta eleva a 19.051 euros anuales el salario mínimo de un director general o gerente, lo que supone un incremento del 17,7% en relación con la cifra que se viene arrastrando del anterior convenio para el grupo 1. Para el grupo 2, la subida es del 15,5% para el departamento médico y del 11,9% en el caso de los enfermeros, fisioterapeutas y jefes de mantenimiento. Para el grupo 3, la subida para los coordinadores es del 6,5%, mientras que la prevista para los técnicos deportivos multidisciplinares es del 4%.
Para las categorías inferiores el porcentaje de aumento es menor. En el grupo 4, la subida contemplada es del 1,5% en el caso del nivel 1, incluye a técnicos deportivos, socorristas, conserjes y jefes de limpieza; y del 0,5% en el caso del nivel 2, que integra a auxiliares administrativos y controladores de accesos. Para el grupo 5, que integra personal de limpieza y peones de mantenimiento, la subida respecto al SMI es del 0,2%.
Tras pactar este punto de partida, los porcentajes de aumento de cara a los dos siguientes años en los que estará vigente el convenio sí son uniformes para el resto de categorías. La actualización de cara a 2024 prevé una subida del 2%. De cara a 2025, el incremento es del doble, un 4%. Esto significa que, con respecto a las cifras arrastradas del anterior convenio, un trabajador del grupo 1 que perciba el mínimo contemplado en el convenio verá incrementado su sueldo un 22,4% a lo largo de estos tres años, hasta 19.818,96 euros. En el caso de la categoría 3.2, que es la que incluye a más trabajadores en los gimnasios, la subida del próximo trienio si se aprueban estas tablas sería del 10,3%, hasta 16.680,87 euros. Para la categoría más baja, el incremento sería del 6,3%.
Más allá de las tablas, las partes también trataron otras cuestiones, algunas de las cuales siguen por concretar. En el caso del plus de transporte, se acordó un pago de 2,8 euros por día para 2023, de 2,9 euros diarios de cara a 2024 y de 3 euros en 2025. Se abona por ir a trabajar, con independencia de las horas de empleo. Esto supone incrementos del 8,5%, del 12,4% y del 16,2%, respectivamente, en relación al plus de transporte que se pactó en el anterior convenio, y que era de 2,58 euros. Actualmente está en 2,63 euros.
En definitiva, y partiendo del mínimo en tablas, durante estos tres años se ha preacordado un incremento del 6%. Es, eso sí, inferior al 10% acordado por los agentes sociales y empresariales a escala nacional, con mejorías del 4% en 2023 y del 3% en 2024 y 2025, además de una cláusula del 1% adicional en estos dos últimos años en función de la inflación.
También se pactaron otros aspectos relativos al articulado y que facilitan la organización del trabajo, como por ejemplo la regulación de períodos vacacionales. Si hasta ahora podían repartir los 23 días de vacaciones en dos períodos, ahora podrán hacerlo en tres. Uno de estos periodos tendrá un mínimo de 15 días. Los ocho días restantes no será necesario disfrutarlos de golpe, sino que se podrán repartir en dos periodos de un mínimo de tres días.
También se han acercado posturas en torno a la posibilidad de regular la posibilidad del fijo discontinuo a tiempo parcial. La última reforma laboral establece que para poder hacer este tipo de contratos hay que preverlo en el convenio sectorial, y en el caso de los gimnasios hasta ahora no estaba previsto. Las partes también consensuaron mejoras acerca de la salud laboral de los empleados. Se añadirán más exámenes de salud y se concretó qué tipo de exámenes se tiene que seguir según el trabajo que realice el monitor. Una de las demandas de los sindicatos cuando denunciaron el IV convenio fue, precisamente, reducir el número de horas de actividad física que asumen los técnicos que imparten clases dirigidas, ya que entendían que podían dar pie a enfermedades provocadas por su profesión pero que no estaban reconocidas como tal.