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L’Orange Bleue busca cinco aperturas en España tras facturar 135 millones en 2021

El gigante galo del fitness francés ha situado al frente de la compañía al español José Nercellas, que está liderando la ofensiva de la empresa en el mercado español. El próximo objetivo de la cadena es introducir la marca también en Italia.

L'orange bleue

L’Orange Bleue retoma su plan de expansión en España cinco años después de su desembarco en el país. La cadena francesa de gimnasios, que opera tres instalaciones en Barcelona, Valencia y Castellón, se ha marcado como objetivo poner en marcha entre cinco y diez clubes a lo largo de 2022. Ello, tras facturar 135 millones en 2021 a nivel global y cerrar el año con un ebitda de alrededor de 13 millones de euros.

El peso indiscutible de este negocio se encuentra en Francia, donde L’Orange Bleue es el segundo mayor operador en implantación, tras Basic-Fit. Allí cuenta con 374 clubes, la mayoría de ellos mediante socios con los que ha alcanzado acuerdos de licencia de marca. Ese es el modelo que ha exportado a España, donde opera un centro propio en Barcelona y dos bajo licencia en Valencia y Castellón. El objetivo para 2022 es elevar la facturación hasta 155 millones de euros, y para lograrlo la compañía francesa ha puesto al frente de todo el negocio, incluido el de Francia, al español José Nercellas.

En su back ground figuran grandes compañías del sector de la distribución y la moda como Decathlon, Orchestra y Ïdkids, y ahora la cadena de gimnasios, con la que espera abrir 200 clubes en cinco años en España. En este mercado busca ciudades con al menos 30.000 habitantes donde poner en marcha instalaciones de aproximadamente 600 metros, que requieren una inversión de entre 250.000 euros y 300.000 euros. La inversión en oscilará entre 1,5 millones y 3 millones de euros para abrir entre cinco y diez locales en 2022.

“En Francia tenemos dos modelos, uno para ciudades de 30.000 habitantes y otro para municipios más pequeños, de en torno a 15.000 ciudadanos, pero en España queremos atacar en poblaciones de 30.000 habitantes”, explica el directivo a 2Playbook. La estrategia pasa por abrir clubes licenciados y propios, si bien no se descarta firmar acuerdos de joint venture con gimnasios que pasar a operar como L’Orange Bleue.

El break even se alcanza con entre 600 y 800 socios en función de la ubicación del local y los costes de alquiler, si bien la mayoría de centros alcanzan los 1.000 abonados. En tiempos de pospandemia, esta cifra ha caído hasta 900 inscritos. De hecho, antes de la pandemia llegó a promediar más de 1.500 socios en Barcelona. “Allí estábamos trabajando bien y eso nos hace pensar que tenemos potencial de expansión en España”, afirma. Sus planes también pasan por llevar la marca a Italia, donde de momento no tiene presencia.

Más allá de la expansión, Nercellas está trabajando en el lanzamiento de un nuevo concepto de club que pondrá en marcha en Francia y que de cara a verano replicará en su gimnasio de la capital catalana. “La inversión será de 150.000 euros para hacerlo más digital; la cercanía al cliente y la oferta de clases dirigidas presenciales con instructor no cambiará, pero serán más modernos”, afirma. La idea es que las nuevas aperturas se desarrollen con este nuevo concepto de centro.

El directivo insiste en que el ADN de la cadena está en la cercanía y el trato personal. Con 1.200 empleados, Nercellas afirma que el principal vector de diferenciación respecto a otros operadores está en el contacto con el cliente. En ese eje estratégico se enmarcan las clases Yako, desarrolladas por el instructor Rémy Huleux, que crea su propio equipo de clases dirigidas para L’Orange Bleue. “Todas las clases dirigidas son con instructores homologados quehan sido formados en L’Orange Bleue; tenemos una escuela de formación, y el 100% de los profesionales encuentran trabajo al finalizar”, afirma.

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