La industria del fitness prevé crecer de forma sustancial a través de las app. La pandemia permitió que el sector de las aplicaciones para la actividad física tomara un papel esencial en el mundo del fitness. Con el confinamiento su uso se disparó y desde entonces no han dejado de crecer. Por ello, se calcula que este mercado pase de los 13.780 millones de dólares (12.213 millones de euros) en 2020 a los 120.370 millones de dólares (106.000 millones de euros) en 2030. 

Estos datos son extraídos del informe de Allied Market Research sobre el mercado de las app del fitness. Para alcanzar esa cifra, el estudio señala que este sector experimentará un crecimiento anual del 24,3% durante esta década.

El mercado se ha adaptado a un contexto en el que las soluciones digitales de los gimnasios y el teletrabajo han permitido que los usuarios vean a las aplicaciones de fitness como la herramienta más rápida y adecuada para su vida deportiva. 

Si bien es cierto que elementos como los errores técnicos, el precio de las compras desde la propia plataforma y la privacidad de los datos del usuario continuan siendo un aspecto disuasorio para utilizar estas apps, el desarrollo de la inteligencia artificial y el aumento de enfermedades como la hipertensión, los problemas cardíacos o la obesidad permitirán que sigan creciendo, tal como apunta el informe. 

Por estas razones, las previsiones indican un incremento del uso del segmento de ejercicio y pérdida de peso. Aún así, se espera que el segmento de seguimiento de actividad sea el que aumente de forma más importante. Por territorios, Norteamérica seguirá siendo el líder en uso de las app de fitness seguido de Asia-Pacífico.  

Por último el estudio aduce al uso de las aplicaciones a través de smartphones, tablets y dispositivos portátiles. En este sentido, señala que el hecho de que la utilización de estos productos está aumentando en países en vías de desarrollo permitirá que el desarrollo de estas tecnologías popularice aún más a las app de fitness. El smartphone, es el que experimentará un mayor crecimiento de aquí al 2030, seguido de los dispositivos portátiles y de la tablet en último lugar.