El futuro del Club de Campo Valencia K7, en el aire. La Justicia ha sacado a subasta la gestión del centro deportivo, que fue asumida en 2019 por un empresario valenciano durante un periodo de diez años. El complejo, que renovó su sala de fitness en 2020, tras la pandemia, continúa operativo y da trabajo a 25 empleados.
“Se admitirá cualquier tipo de oferta, si bien en el caso de no alcanzar el valor asignado en el plan se esperará hasta el transcurso del plazo de un mes, adjudicándose a la mejor oferta recibida. En el caso, que la oferta iguale o supere el valor asignado en el plan se procederá́ a su venta inmediata”, según la documentación de la subasta a la que ha accedido Valencia Plaza.
El citado medio cuantifica en 1,3 millones de euros la facturación de la sociedad Invest Maycar Group VLC, encargada de la gestión del centro, que tiene 33.000 metros cuadrados distribuidos entre gimnasio, sala para actividades dirigidas, área de restauración, 21 pistas de pádel y 7 frontones.
