Infinit Group crece más allá de la línea de negocio especializada en centros deportivos que creó en 2012. La compañía ha retomado su expansión con gimnasios y con la ampliación de servicios bajo el paraguas del deporte, con la puesta en marcha de un coworking en su sede central de San Sebastián de los Reyes. Después de que la empresa se mudara a unas oficinas de 250 metros cuadrados, ha decidido abrir su sede a start ups y emprendedores del sector, con quienes crear sinergias.
El espacio de 250 metros cuadrados se lanzará en septiembre, y busca dar entrada a coworkers que quieran aprovechar la plataforma de Infinit Group para desarrollar y probar productos. Pueden ser proyectos de tecnología aplicada al deporte y la gestión, desde empresas de inteligencia artificial o control de accesos, hasta emprendedores centrados en la conectividad para dar soporte al entrenamiento.
“Si podemos apoyar financieramente y en la gestión a empresas del sector, nos encaja; la idea es ofrecer oficinas a empresarios que compartan su pasión con el fitness y el deporte, y a partir de ahí colaborar, compartir conocimientos y desde el grupo dar un servicio de apoyo a los proyectos”, explica a 2Playbook el fundador y consejero delegado de Infinit Group, Marcos Baroja. El grupo, del que pende la cadena de gimnasios, ya ha lanzado su web corporativa
En paralelo, la compañía está inmersa en el estudio de oportunidades de expansión y búsqueda de locales para ampliar su red de gimnasios, que en la actualidad cuenta con catorce ubicaciones, una en el País Vasco y el resto en la Comunidad de Madrid. Cinco de esos clubes son franquiciados, y el resto son propios o participados de manera minoritaria. La inversión necesaria para abrir un club Infinit Fitness oscila entre 350.000 euros y 400.000 euros, y los clubes suelen contar con alrededor de 450 metros cuadrados.
A diferencia de otras cadenas de gimnasios 24 horas que operan con el modelo de franquicia, Infinit Fitness ha fidelizado a toda su red de inversores. “Ayuda el tener una red muy controlada; hemos intentado ser cercanos a los franquiciados y buscar soluciones conjuntas en la que todos sumamos”, asegura.
Además, en tiempos de pandemia ha reforzado su servicio de entrenamiento personal y en grupos reducidos bajo la marca WeYou. “Aún no estamos franquiciándola para abrir clubes con esa firma, pero sí que la ofrecemos a los franquiciados que adquieren una licencia de Infinit Fitness para que la incorporen como corner”, detalla, al reafirmar su confianza en el entrenamiento personal como tendencia.
Es esa apuesta la que ha permitido elevar el ticket medio de la cadena. De hecho, la previsión es alcanzar el volumen de clientes prepandemia en primavera de 2022, momento en que prevé estar facturando un 10% más de lo que vendía en el mismo periodo de 2019. Aquel año, la cadena facturó 4 millones de euros y tuvo 7.500 clientes.
La cadena también ha reforzado sus acciones de responsabilidad social corporativa, y ha lanzado una campaña con la asociación WWF para favorecer las donaciones a la entidad, que lucha contra el cambio climático y por la preservación de la naturaleza. En concreto, la compañía donará 5 euros por cada socio que acudió al club a entrenar en los diez primeros días de junio y por cada alta registrada durante este mes.
