Los gimnasios españoles empeoran sus previsiones de recuperación del negocio tras el Covid-19. La Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones Deportivas (Fneid), que actúa como patronal, eleva sus previsiones de pérdidas hasta los 1.246 millones de euros. Esto supone que cada centro fitness tendrá de media un 53% menos de facturación con respecto a 2019, por el 44% de caída que se previa hace cuatro meses.
Así se desprende del informe Impacto Covid-19 en Instalaciones Deportivas, realizado por la consultora Valgo en colaboración con el grupo de investigación Gisdoras de la Universidad de Sevilla.
El informe indica que un 56% de los directivos de los centros fitness encuestados considera que podrían comenzar a recuperar los niveles de facturación del 2019 a partir del tercer trimestre de 2021. Igualmente, un 84% de los centros empeoran sus previsiones respecto al mes de mayo, y solo el 16% restante las mantiene. “Estas cifras indican que el contexto actual está poniendo en riesgo la supervivencia de un sector que suma más de 214.000 puestos de trabajo y cuenta con más de 4.700 centros deportivos en nuestro país y actúa como motor paralelo de otras industrias”, lamenta Fneid.
Su gerente, Alberto García Chápuli, denuncia que “la situación es dramática y si continúa así el 44% de nuestras empresas se verán abocadas al cierre”. Por ello, la patronal ha solicitado “el respaldo que merecen los servicios que prestamos, no olvidemos que somos un sector esencial para la salud, que promueve la actividad física y refuerza el sistema inmunológico, tan importante para enfrentarnos a este virus”.
Más allá de estas medidas, la patronal del fitness ha pedido al Gobierno apoyos específicos para superar la situación que están atravesando tras el cierre de sus centros durante el confinamiento y las reducciones de aforo de los últimos meses. En concreto, los empresarios del sector piden medidas como, la cadencia de los créditos ICO o la reducción del IVA, que es una reclamación que el sector lleva años haciendo, desde que se elevó el impuesto al 21% en 2012.
García también ha defendido que los centros deportivos son instalaciones seguras para la realización de ejercicio físico, ya que según Fneid sólo solo ha detectado un brote en el país que haya estado vinculado a centros deportivos. En total, en España operan 4.700 instalaciones.