El Gobierno español ha presentado un plan de ayudas de 6.800 millones de euros para mejorar la eficiencia energética de los edificios y reducir su huella de carbono, y el sector del fitness quiere beneficiarse de estos apoyos para operar en infraestructuras más sostenibles. Por ello, el clúster gallego del deporte ha encargado a la consultora BDO la búsqueda de ayudas de los fondos Next Generation EU, con el que aspiran a recibir 200 millones de euros, según informa El Confidencial.
Con estas ayudas, las cadenas de gimnasios podrían costear las obras y cambios necesarios para mejorar la sostenibilidad de los equipamientos, permitiendo un ahorro energético que dejaría una huella positiva en la cuenta de resultados en el futuro. De ahí que se hayan sumado al proyecto once operadores que gestionan 72 centros deportivos en el todo el país. Estas empresas esperan lograr hasta 40 millones de euros, aunque la voluntad del sector es atraer hasta 200 millones si se suman nuevos operadores. Entre las cadenas que se han sumado están BeOne, AQA, Máis que Auga, Enjoy, Suma Fitness Clubs, Deporocio, Grupo Demmero y la valenciana Atalanta Sports Club.
De acuerdo con los cálculos elaborados por BDO, se realizarán inversiones en energía solar, que representa un 15% aproximadamente del consumo total; energía de la biomasa (cambio de calderas de gasóleo a biomasa) 30-60 MWs e inversiones en la recuperación del calor para climatización de piscinas, aislamiento de cubiertas, calderas de condensación y ahorradores de gas, entre otras mejoras de eficiencia energética.
Con todas estás, el clúster y BDO creen que podrán reducir el consumo entre 30 millones y 35 millones de kWh al año en los centros ya adheridos al proyecto, que suponen un 17% del total de los que hay en España. Las ayudas obtenidas se dedicarán en un 60% a medidas de eficiencia energética y el 40% restante a autoconsumo fotovoltaico. La inversión que no cubran los fondos europeos la aportarán los operadores con recursos propios y deuda.