El fitness en Estados Unidos registró una fuerte recuperación en 2021. Durante el año pasado se registraron 66,5 millones de abonados a gimnasios en EEUU, un 9% menos que en 2019, año prepandemia. Durante el pasado ejercicio se alcanzó el récord de personas que en algún momento estuvieron inscritas a un centro deportivo, con 76,5 millones. Además, aumentó un 41,6% el número de accesos a gimnasios, con 4.500 millones, según Ihrsa. Eso sí, se redujo un 36,8% respecto a niveles prepandemia.
“El sector sólo ha alcanzado aproximadamente dos tercios de los niveles anteriores al Covid”, ha destacado Liz Clark, presidenta y directora ejecutiva de Ihrsa. Según un informe de la asociación, los clubes low cost fueron los más populares, pues el 41% de los clientes paga menos de 25 dólares al mes por acceder a un gimnasio.
En cuanto al equipamiento más utilizado, las cintas de correr continuaron siendo las más usadas. Le siguieron las máquinas de musculación con peso dirigido y la zona de peso libre. Es algo que en Estados Unidos no ha cambiado con la Covid-19, a diferencia de en España, donde las cadenas de gimnasios aseguran que los usuarios están usando más la zona de entrenamiento de fuerza y menos la de cardio. En cuanto a las disciplinas más practicadas, al igual que en 2019, se mantuvo el yoga como sesión estrella. Le siguieron el Hiit y la natación.