Publicidad

Fit Jeff entra en Chile y prevé abrir veinte clubes en España hasta marzo de 2022

La cadena de estudios de entrenamiento en grupo, que a través del grupo de franquicias Jeff opera en cuarenta países, está firmando acuerdos para crecer en Madrid, Barcelona, Murcia, Sevilla y Valencia.

Fit jeff usuaria

Fit Jeff pone la directa para crecer en España y el extranjero con su concepto de gimnasio de barrio especializado en clases dirigidas. La cadena, que forma parte del grupo Jeff, ha dado el pistoletazo de salida a una nueva fase de expansión que hará coincidir con uno de los momentos clave del año para los gimnasios: el arranque del año y los nuevos propósitos. La cadena prevé poner en marcha una veintena de instalaciones en Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Murcia durante el primer trimestre de 2022.

Además, está en negociaciones con potenciales franquiciados interesados en abrir estudios en otras ciudades, como Zaragoza y el País Vasco. La idea es crecer en ciudades con una población que oscila los 200.000 habitantes y los 250.000 residente. El breakeven de cada estudio se consigue con 140 abonados, aunque la perspectiva es alcanzar los 180 inscritos entre ocho y doce meses después de la apertura.

Alcanzar los 280 clientes por club permite generar caja suficiente como para abrir un nuevo estudio Fit Jeff, que requiere de una inversión de entre 50.000 euros y 60.000 euros. Se trata de espacios diáfanos de entre 75 metros y 100 metros cuadrados y sin equipamiento, lo que permite controlar el desembolso realizado en abrir.

La compañía, que en la actualidad opera en Valencia, Madrid, México y Ecuador, acaba de abrir en Bogotá su primer club en Colombia, y tiene la intención de sumar otro local en Medellín. En total gestiona una veintena de instalaciones, una cifra que irá en aumento en las próximas semanas, pues este mes plantará bandera en Chile, y próximamente espera hacerlo en Estados Unidos y Canadá. Allí opera ya con otras marcas del grupo, como es el servicio de lavandería y los coworking.

Al margen de los acuerdos de desarrollo de la marca que está firmando en esos mercados, en España ha sellado una alianza con White Investing, gestora de activos inmobiliarios y compañía encargada de comprar locales, remodelarlos para abrir locales de Jeff y alquilarlos a franquiciados, que devuelven el importe de la inversión durante un plazo de diez años.

“Eso nos permite controlar la ubicación, calidad y look and feel del centro, al tiempo que acelerar la obra y reducir la inversión necesaria que debe realizar un franquiciado”, explica Diego Moya, director de Fit Jeff. Con este modelo de real estate, la compañía busca “democratizar el emprendimiento para que los franquiciados puedan apostar por ello al margen de la capacidad que tengan para invertir”, asegura.

La idea es que los inversores paguen la tasa de adhesión a la marca y amorticen la obra previamente asumida por White Investing, un modelo con el que buscan atraer a entrenadores que ven en Fit Jeff una posibilidad de autoempleo. “Al dejar de necesitar financiación externa, se agiliza y facilita el proceso de apertura”, recalca.

La compañía ofrece entrenamiento grupal especializado en yoga, pilates, funcional y alta intensidad (Hiit). Esta última se imparte en clases de duración más corta, de 25 minutos, lo que ayuda a atraer al público con menos tiempo para entrenar. La empresa, que lanzó un sistema de entrenamiento online, admite que en la actualidad esta opción la utiliza entre un 10% y un 15% de su base de abonados.

“No lo vemos como una línea de negocio adicional, sino como un servicio complementario que ofrezca la flexibilidad de entrenar en casa cuando no puedan venir al club; entre el 80% y 90% de las clases se realizan de manera presencial”, afirma Moya. De media, los clientes acuden al club siete veces al mes.

Publicidad

Publicidad