La lucha contra el sedentarismo será uno de los múltiples factores que intervendrán en las elecciones generales del próximo domingo. La apuesta por fomentar la actividad física entre la mayor parte de la población es un denominador común entre las principales formaciones que incurrirán en las elecciones generales del 23-J. La mayoría coinciden en reivindicar su esencialidad a través de planes de fomento de la actividad física y del deporte. Sin embargo, los programas electorales de los partidos presentan matices más que significativos cuando refieren a la implementación de una hoja de ruta que contribuya, entre otros aspectos, a activar a parte del 47% de la población española que no realiza nada de ejercicio físico, según datos del Eurobarómetro de la Comisión Europea.
La fiscalidad, la igualdad de género, la lucha contra la xenofobia y el racismo en el deporte o la receta deportiva son algunas de las propuestas más comunes entre los programas electorales de las ocho principales formaciones políticas que se presentan a estos comicios. La rebaja del IVA a los servicios prestados por centros y profesionales de la actividad física, una petición histórica del sector del fitness, es una medida que pone de acuerdo a VOX y PP con ERC y Junts per Catalunya. El partido dirigido por Santiago Abascal apuesta por revertir la subida realizada por el PP en 2012 y volver al 8%.
La formación dirigida por Alberto Núñez Feijoó muestra algo más de ambigüedad al respecto. Borja Sémper, portavoz de campaña del PP, aseguró a la patronal española de gimnasios, Fneid, que estudiarán la restitución del IVA reducido del 10% a la actividad deportiva, aunque sin comprometerse a ello si gobiernan. Esta declaración de intenciones, sin embargo, no aparece en su programa electoral. El PNV también plantea la posibilidad de revisar los tipos de IVA de los diferentes servicios y bienes para “evitar inequidades”, pero no concreta qué postura adoptaría en el caso del sector deportivo.
Junts y ERC también proponen una rebaja al tipo reducido del 10%. La formación republicana, la única que apuesta por reducir la base imponible en el tramo estatal del IRPF de todo el gasto en actividad física y deportiva, va más allá y plantea bajar este impuesto al tipo súper reducido del 4% o, incluso, a hacer una excepción, que tribute 0%, en aquellos casos en los que la actividad física esté “prescrita facultativamente para la recuperación o prevención de patologías y lesiones”. Esta última medida va de la mano de la receta deportiva, un programa que busca crear sinergias entre el sector médico y el deportivo, de forma que los médicos puedan derivar a pacientes con determinadas patologías a centros deportivos donde puedan tratarlos profesionales de la actividad física.
El PSOE impulsó el año pasado el Plan de Prescripción de la Actividad y Ejercicio Físico, un programa dotado con un máximo de 9 millones de euros para que los departamentos de salud de las comunidades autónomas, de la mano de los centros deportivos municipales, puedan ejecutar iniciativas de este tipo hasta finales de 2023. PP y Sumar también están a favor de generalizar la prescripción médica de la receta deportiva. Sumar, incluso, propone incorporar a profesionales de las ciencias del deporte en los centros de salud y añadir programas médicos a los centros deportivos para tratar posibles dolencias y lesiones.
Las propuestas vinculadas a la fiscalidad, sin embargo, van más allá del IVA. El PSOE apuesta por dar continuidad al programa Reto De, que busca dar a las zonas rurales beneficios fiscales en materia deportiva para la adecuación de instalaciones deportivas. Vox, en cambio, apuesta por crear “un programa de desgravaciones fiscales en conceptos como educación o práctica deportiva para los preceptores de rentas de jubilación y mayores de 65 años con cargas familiares”. Sumar también es partidario de “buscar fórmulas para fijar precios reducidos” en gimnasios e instalaciones deportivas para personas mayores y en situación de vulnerabilidad.
La formación encabezada por Yolanda Díaz coincide con el PP y Junts a la hora de plantear mejorar la legislación sobre patrocinio y mecenazgo para facilitar las aportaciones e inversiones privadas en deporte, con bonificaciones fiscales. Junts también apuesta por modificar el marco normativo fiscal que afecta al deporte base para favorecer que los clubes y entidades deportivas puedan obtener financiación a partir de “pequeñas actividades económicas” que luego no tengan que tributar. ERC, por su parte, opta por “crear un régimen especial en la Seguridad Social o una reducción de cuotas a la Seguridad Social para el personal técnico vinculado laboralmente a entidades deportivas”.
Los republicanos son, junto a Sumar, las únicas formaciones que reclaman explícitamente una mejora presupuestaria en el deporte. Este último partido propone un pacto de suelo presupuestario en inversión pública deportiva al 0,25% del PIB, lo que implicaría multiplicar por más de cuatro la actual inversión del 0,06%. Además, plantea crear un “cheque deporte” anual para niños, niñas y jóvenes que quieran usar servicios deportivos.
La igualdad de género en el deporte, otro frente abierto que genera consenso
En un país en el que las mujeres sólo ocupan un 24,6% de las licencias deportivas federadas y un 35% de los cargos directivos en entidades deportivas, los partidos son conscientes que aún queda mucho por hacer para poner fin a la brecha de género que aún existe en el deporte. “Pondremos el foco en el acceso de las mujeres a la práctica deportiva, la presencia de las mismas en puestos de gestión”, asegura el programa electoral del PSOE, que aspira a alcanzar la “igualdad real y efectiva entre hombre y mujeres en el deporte”. En la misma línea se pronuncian el PP, Sumar, ERC y Bildu. Este último partido, además, propone “igualar los recursos para el deporte masculino y femenino y fomentar que las federaciones dispongan de un plan de igualdad”.
Otro frente común en el que se encuentran los principales partidos de ámbito estatal es la lucha contra la violencia, racismo, xenofobia e intolerancia en el deporte. Psoe, PP y Sumar apuestan por promover iniciativas, tales como protocolos y cursos de formación que fomenten valores y ayuden a combatir situaciones y comentarios de este tipo, así como abusos y violencia sexual en el deporte. Estos mismos partidos también coinciden a la hora de proponer un nuevo marco regulatorio para las profesiones vinculadas al deporte. El fomento del turismo deportivo, la apuesta por la digitalización, la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones son otras cuestiones apoyadas por varias formaciones.
De estudios para cuantificar el impacto del sedentarismo a las selecciones autonómicas
Más allá de estas propuestas de amplio consenso, los partidos también incluyen otras medidas particulares. El PSOE, por ejemplo, propone desarrollar un estatuto del deportista y crear un hub de innovación deportiva que genere un impulso económico para el sector y atraiga talento. El PP pone el foco en apoyar competiciones deportivas como escaparate de la capacidad organizativa del país.
Sumar apuesta por promover estudios relativos al coste laboral derivados de problemas de salud asociados al sedentarismo, así como otros vinculados al impacto del deporte en la economía. Uno de los pocos informes que existen al respecto, realizado por la Sociedad Española de Obesidad (Seedo), apuntan que la inactividad física supone cada año un gasto sanitario para el sistema de salud español de 1.560 millones de euros.
La formación liderada por Yolanda Díaz también plantea incorporar espacios de salud, con equipamientos de ejercitación física, en entornos al aire libre como parques, jardines y espacios lúdicos, así como incrementar la oferta pública con espacios como carriles bici, parques de salud, rocódromos o pistas de patinaje, entre otros. Además, propone promover actividades deportivas nocturnas dirigidas a la población joven con tal de fomentar el ocio saludable, y aumentar a tres las horas semanales de actividad física en la educación escolar, una medida, esta última, que también aparece en el programa electoral del PP.
Los partidos catalanes y vascos, por su parte, comparten la lucha por el reconocimiento internacional de las respectivas selecciones deportivas autonómicas y de sus respectivas lenguas, de forma que tanto el catalán como el euskera tengan un peso destacado en eventos deportivos e internacionales que se organicen en sus respectivos territorios. ERC, reclama la “disolución del Ministerio de Deportes y la transferencia de sus competencias y recursos” a los gobiernos autonómicos. Junts, el reconocimiento del Comité Olímpico de Cataluña como miembro de pleno derecho del Comité Olímpico Internacional.
