F45 entra en pérdidas. La cadena australiana de estudios de entrenamiento funcional y de alta intensidad reportó unos números rojos de 197,5 millones de dólares (172,2 millones de euros) entre enero y septiembre de 2021, un resultado que contrasta con el beneficio de 6,4 millones de dólares (5,5 millones de euros) que registró en ese periodo del año pasado.
La compañía mejoró sus ventas un 12,4%, hasta 72,2 millones de dólares (62,9 millones de euros). Es decir, perdió más del doble del dinero que facturó. Su principal mercado fue Estados Unidos, con unas ventas de 41 millones de dólares (35,7 millones de euros) y un alza del 24,6% interanual; le siguió Australia, con 15,8 millones de dólares (13,7 millones de euros), donde sus ventas cayeron un 1,8%. En el resto de países en los que opera facturó 15,3 millones de dólares (13,3 millones de euros), un 2% más.
En la actualidad, la cadena opera 1.618 estudios, 242 clubes más que hace un año. En Estados Unidos tiene 586 centros, por las 633 franquicias que tiene en Australia. En el resto del mundo, incluida España, opera 399 instalaciones.
Para diferenciarse de otros centros especializados en entrenamiento funcional o Hiit que operan en el mercado, la compañía ha basado su propuesta en tres pilares: el entrenamiento en grupos en el estudio, el sentimiento de comunidad y el asesoramiento nutricional y vinculado al descanso, que está incluido en la cuota.