John Foley desinvierte en Peloton tras dejar de ser consejero delegado de la compañía. El directivo, que recientemente ha dejado el cargo y ha asumido la presidencia ejecutiva de una empresa en plena fase de reestructuración, se ha desprendido de 1,92 millones de títulos, adquiridos por la firma de inversión de Michael Dell por 50 millones de dólares (45,9 millones de euros), según Bloomberg.
Se trata de MSD Partners, que está consolidando sus posiciones en el sector deportivo puesto que recientemente ha participado en una ampliación de capital de 1.500 millones de dólares (1.377 millones de euros) en Fanatics.
La operación llega semanas después de que la compañía anunciara unas pérdidas de 809,9 millones de dólares (743,7 millones de euros) en el primer semestre de su ejercicio fiscal, que arranca en julio y finaliza en junio. Los ingresos aumentaron un 6,3%, hasta 1.939 millones de dólares (1.780 millones de euros) tras varios trimestres doblando las ventas. ¿El motivo de la ralentización? Por primera vez en la historia redujo sus ingresos por la venta de equipamiento conectado, que a día de hoy continúa siendo la principal línea de negocio de Peloton.
La compañía redujo su ritmo de producción ante la caída de la demanda y, al no cumplir previsiones, ha anunciado una reestructuración global con la que espera ahorrar al menos 800 millones de dólares al año (734 millones de euros). Como parte del plan, se recortarán 2.800 puestos de trabajo. Los puestos corporativos, es decir, el personal de oficinas, se reducirá un 20%. La plantilla de instructores no se verá recortada.
La empresa prevé destinar 130 millones de dólares (119 millones de euros) a indemnizaciones en efectivo y otros 80 millones de dólares en cargos no monetarios (73,4 millones de euros). A ello se suman 150 millones de dólares (137 millones de euros) para reducir inversiones en bienes de capital (capex) en 2022.
Todo ello se anunció el mismo día que John Foley comunicó que dejaría de ser consejero delegado, cediendo el testigo a un exdirectivo de Nike y de Spotify: Barry McCarthy. Foley seguirá como presidente ejecutivo, pero el día a día de la compañía recaerá en otro perfil de directivo con el que la empresa espera alcanzar la rentabilidad.