Evofit busca crecer en el sur de España a través de la conversión de centros operativos que pasen por dificultades. La cadena gallega de gimnasios low cost ha integrado un club en Alhaurín el Grande, cerca de Marbella, que pondrá en marcha a partir del próximo junio. Será su primera franquicia en la mitad sur del país, ya que los 14 gimnasios que gestiona en la actualidad se reparten entre Galicia y Castilla y León.
Aunque actualmente la totalidad de sus centros son propios, la cadena está trabajando para crecer por todo el territorio español a través de franquiciados. “Esperamos que este primer centro provoque la expansión por Andalucía y, a partir de ahí, queremos crecer con franquicias por todo el país”, explica Luis Pernas, fundador y propietario de Evofit. La cadena de momento descarta expandirse mediante traspasos, ya que quiere hacerlo vertebrando a partir de franquiciados de confianza en los distintos territorios.
La compañía, que nació en 2002, se propuso a mediados de 2020 integrar gimnasios en apuros económicos que, sin embargo, tuvieran potencial para ser viables. “Queremos captar gimnasios de toda España que, por las circunstancias que se dan de grandes fondos expandiendo cadenas, quieran evitar el cierre”, indica Pernas. La compañía, que busca centros deportivos de más de 700 metros cuadrados, cobra a sus franquiciados un canon inicial de 10.000 euros y, luego, un royalty de euro por socio.
Evofit, que da servicio a más de 10.000 abonados, puso en marcha dos centros el año pasado en la provincia de La Coruña. Antes de verano abrió Evofit Asociación Canido, centro que opera sin máquinas, ya que se limita a ofrecer actividades dirigidas. A finales de año, en noviembre, empezó a operar el Evofit Narón L61, que reemplazó un antiguo box de entrenamiento de cross-training en el que, además de actividades dirigidas y artes marciales, ha habilitado un espacio de Hyrox.
Con este, ya son seis los gimnasios que la compañía opera entre Narón y Ferrol. El último, además, reabrió a pocos metros de donde opera un Altafit y de donde en enero se puso en marcha un Basic-Fit. “Por suerte, de momento, apenas hemos sufrido una docena de bajas tras esta apertura”, matiza Pernas, que considera que el segmento low cost se ha visto beneficiado del encarecimiento de las hipotecas registrado en el último año.
“La pérdida de poder adquisitivo nos ha causado algunas bajas, pero más altas de usuarios que se dan de baja de gimnasios de mayor coste”. El empresario y exculturista dirige esta compañía junto a su mujer, sin el apoyo financiero de fondos de inversión. Una puerta que, asegura, no cierra: “Sería cuestión de sentarse y hablar”. Pernas, que también gestiona con otros socios y una sociedad distinta la cadena premium Wonder Company, que opera dos centros deportivos en Galicia, no prevé de momento nuevas aperturas de esta marca.
La compañía no revela los datos de negocio con los que cerró el año pasado, aunque su propietario puntualiza que generó el volumen de ingresos más elevado y el mayor beneficio de su trayectoria. La cadena, que da por superada la pandemia, invirtió más de 100.000 euros en la ampliación de 1.500 metros cuadrados en el centro de Vilagarcía (Pontevedra), que desde el mes pasado tiene 4.500 metros cuadrados.
Por otro lado, la empresa está pendiente de los juzgados para reabrir uno de sus centros, el que gestiona en Caldas de Reis (Pontevedra). Evofit ha denunciado por impago a Innovapadel, empresa a la que alquiló la explotación de las pistas de pádel que se encuentran en la nave que gestiona y a la que reclama más de 185.000 euros más intereses. El juicio está previsto para mayo de 2024.