DreamFit protege su posición de caja frente a la Covid-19. La cadena ha aprovechado su bajo nivel de endeudamiento para mejorar su posición de tesorería y navegar con más calma durante la pandemia con créditos con el aval del Estado por cerca de 9 millones de euros. De momento, la compañía ha perdido más del 40% en su base de abonados y ha sufrido un descenso de las ventas del 32% en 2020, hasta cerca de 16 millones de euros, según admite la compañía.
“Empezaremos la recuperación en otoño de 2021 y durará hasta 2023; puede que en 2023 alcancemos un nivel de negocio similar al 2019, y queríamos disponer de liquidez para operar durante estos meses”, argumenta a 2Playbook Rafael Cecilio, presidente y propietario de la cadena de gimnasios.
Ha sido la apuesta de los accionistas de la compañía por reinvertir los dividendos en la empresa lo que ha permitido a DreamFit expandirse sin apalancarse demasiado. “La premisa ha sido reinvertir para crecer y tirando de nuestro cash; antes de la pandemia teníamos una generación de caja superior a los 10 millones de euros”, detalla.
Es un nivel de liquidez con el que la compañía podía abrir hasta cuatro complejos al año. “No alcanzábamos esa media porque hay que dar con la ubicación ideal y conseguir las licencias, pero hemos llegado a esta crisis con una situación económica fuerte”, añade, sin esconder que el impacto de la pandemia ha sido “muy duro”.
DreamFit abrirá seis instalaciones entre 2021 y 2022 en Madrid, Barcelona y País Vasco
El directivo reconoce que la gestión del día a día se combina con la que la dirección hace a largo plazo. “Debemos trabajar con luces largas, pero también cortas, cuidando a nuestros abonados y empleados y la situación de caja”, explica. A largo plazo, Cecilio augura a que el sector tiene futuro y “se verá reforzado porque tenemos puesto el foco en la salud”, pero añade que deberá seguir evolucionando “en el área digital, adaptando su modelo para evitar aglomeraciones y actualizar sus instalaciones, su oferta y los precios”.
El directivo afirma que el sector tiene margen para elevar los precios y mejorar la percepción del valor del servicio que ofrecen las cadenas de gimnasios, y apunta a que no quedará otra opción si los centros deportivos operan con menos clientela. “Si se busca la distancia física, imagino un sector operando con menos clientes, con más clubes disponibles y una tarifa algo superior”, dilucida.
DreamFit tiene en su pipeline la apertura de seis centros deportivos en Madrid y alrededores (3), País Vasco (2) y L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona). La previsión es abrir en 2021 en Parla, San Sebastián de los Reyes, Parla y Barakaldo, mientras que en 2022 lo hará en Getafe y L’Hospitalet. En la actualidad, la compañía opera 19 instalaciones en Madrid (7), Barcelona (2), Valencia, Castellón, Segovia, Sevilla, Las Palmas, Oviedo, Gijón, Logroño y Zaragoza.