El sector del fitness sigue acusando el golpe de la pandemia. Dos de los principales operadores británicos del sector, David Lloyd y Fitness First, han anunciado diferentes cierres en Reino Unido como parte de su estrategia de racionalización de sus modelos de clúster. Las dos empresas han justificado esta decisión por el impacto causado por la Covid-19, que ha provocado que ambos centros dejasen de ser comercialmente viables, según ha informado HCM.
David Lloyd ha clausurado su único estudio Blaze independiente en Birmingham. Antes de la pandemia, la compañía se planteaba lanzar Blaze Studios como una marca separada. La enseña ha ofrecido a los clientes la opción de usar los estudios Blaze de otras ubicaciones cercanas. Fitness First, por su parte, ha cerrado uno de sus centros en Londres y ha transferido sus socios al cercano Fitness First Cottons, ofreciéndoles seis meses de abono gratuito a los afectados.