La pandemia tiñó de rojo las cuentas de Paidesport en 2020, rompiendo así con la tendencia a la sostenibilidad de los últimos años. En un ejercicio en que las cadenas se vieron obligadas a cerrar gimnasios durante el confinamiento y la desescalada, la gestora finalizó el primer curso de la Covid-19 con unas pérdidas de 1,1 millones de euros. No es algo insólito en un sector golpeado por la crisis sanitaria, que provocó una caída del 48% en los ingresos de la empresa, hasta 5,9 millones de euros. El descenso del número de abonados fue superior, de más del 50%, con alrededor de 20.000 abonados.

Es un resultado que contrasta con el millón de beneficios que generó en 2019, cuando sus ventas se elevaron hasta 11 millones de euros, según las cuentas analizadas por 2Playbook Intelligence, la plataforma de inteligencia de mercado de 2Playbook. “No se vislumbra una salida rápida para el sector; a la fecha actual desconocemos los efectos finales pero dado que durante los primeros meses de 2021 la facturación permanece muy por debajo de lo esperado creemos que impactará en sentido negativo en la cuenta de resultados”, afirma la dirección en su memoria anual.

La compañía se sumó a otras cadenas del sector y, en coordinación con las asociaciones del fitness, presentó una demanda contra la Administración por daños y perjuicios provocado por el cierre de instalaciones reclamado por los gobiernos. El ebitda fue negativo en 340.000 euros, mientras que en un año normal como 2019 fue positivo en 2,2 millones. De hecho, Paidesport Center ha sido rentable durante los últimos años. En 2015, con la recuperación económica ya visulmbrándose, ganó 1,3 millones de euros y entre ese año y 2019 sus ventas aumentaron un 22,7%.

Paidesport Center firmó créditos bancarios por 1,2 millones de euros en 2020 para afrontar el impacto de la Covid

La compañía fortaleció su balance con la solicitud de un crédito a Banco Santander por 500.000 euros y vencimiento en 2023, y otro a CaixaBank por 700.000 euros a pagar en 2024 “debido a la situación de la pandemia”. En total, 1,2 millones de euros que elevaron a 2 millones de euros la deuda que Paidesport Center tiene con la banca.

En otras palabras: la empresa recibió el impacto de la pandemia en un momento en que estaba poco endeudada. De hecho, pese a la Covid, su situación es buena, y prueba de ello es que su deuda neta fue negativa en un millón de euros, al contar con efectivo e inversiones financieras por 3,3 millones.

La cadena liderada por Aurelio Gómez buscó reducir gastos para mitigar el impacto de la crisis sanitaria y acogerse a Ertes supuso una reducción del 28% en sus gastos de personal, que cayeron hasta 3,11 millones de euros. La compañía finalizó el año con 270 empleados fijos y discontinuos, dieciséis menos que en 2019.

En la actualidad la compañía opera ocho instalaciones en España en la Comunidad de Madrid (4), Comunidad Valenciana (2), Aragón y Asturias. Su gimnasio tipo tiene entre 3.000 metros y 4.000 metros cuadrados, con excepción del club de Trasona (Asturias), de 10.000 metros cuadrados. A principios de año dejó de operar un club en la Torre Picasso de Madrid al finalizar el contrato de alquiler en un edificio controlado por Pontegadea Inmobiliaria, vehículo inversor inmobiliario del fundador de Inditex, Amancio Ortega. Ahora ese espacio lo ocupará Altafit, pues un grupo de franquiciados ha tomado el testigo y realizará una inversión de 1,5 millones de euros para remodelarlo.