Las apps que llevan al mundo online un servicio que tradicionalmente ha sido presencial, como el entrenamiento, tienen la gran oportunidad de sumar clientes en cualquier parte del mundo, pero también un reto: generar comunidad entre una base de usuarios que no comparten un espacio físico. Y de ello depende, en numerosos casos, la capacidad de una aplicación de fidelizar a un público que, con sólo un clic, puede dejar de ser cliente.
“El principal desafío es crear una experiencia que permita a los usuarios conectarse y relacionarse de manera significativa y personal en un entorno virtual”, reconoce Marçal Valls, director general de Buddyfit en España. Lograrlo no es fácil, pero intentarlo pasa por “ofrecer clases en vivo que permitan a los usuarios interactuar con los entrenadores en tiempo real”, afirma.
De ahí que la app italiana haya incorporado un chat para fomentar la comunicación entre los usuarios y los entrenadores, con el fin de acercar la experiencia del entreno online al que se da en un espacio físico. Así, se busca mejorar el servicio de un grupo de población que ha empezado a usar, o ha seguido utilizando, el gimnasio virtual tras la etapa más restrictiva del confinamiento. El 78,2% de los españoles mayores de 15 años que se ejercitaron online entre marzo y mayo de 2020, mantuvieron su frecuencia deportiva virtual tras el confinamiento, según datos del Consejo Superior de Deportes (CSD). Un 4,5% incluso aumentó su frecuencia de entrenamiento.
Aplicaciones como Buddyfit han traspasado el ‘smartphone’ y organizado eventos presenciales para generar comunidad
Pero, más allá de ello y de la posibilidad de compartir fotografías, la evolución e hitos de los usuarios, estas aplicaciones buscan derribar la barrera de la pantalla y saltar al mundo físico con la organización de eventos para compartir entrenamientos y experiencia in situ. “Dentro del roadmap se contempla la idea de crear espacios libres donde los usuarios puedan conocerse y tener más contacto directo. Estos eventos presenciales son una forma de fortalecer la comunidad y crear una sensación de apoyo mutuo, motivación y conexión”, afirma Valls. Buddyfit ha organizado varios eventos presenciales para que sus usuarios entrenen juntos, y el buen resultado que han tenido estas iniciativas ha animado a la empresa a dar un paso más en esta dirección.
El tercer pilar en el que se cimenta la estrategia para generar comunidad entre la base de clientes está muy vinculado a la gamificación: lanzar retos y desafíos que ayuden a fomentar la participación de los usuarios y el sentido de pertenencia. “Es uno de los grandes objetivos de este año”, afirma el directivo. La idea es lanzar retos por equipos, ya que al entrenar en grupo se trabaja en un objetivo común que ayude a conectar y motivar”, afirma.
A ello se suma el entrenador y entrenadora como prescriptores e influencers, algo que la app italiana ha trabajado a doble escala. Por un lado, incorporando a los atletas olímpicos Ona Carbonell y Saúl Craviotto como protagonistas de algunos de sus planes de entrenamiento. “Apostamos por perfiles muy horizontales que nos ayudan a conectar aún mejor con nuestros usuarios; facilitan llegar a ofrecerles una mejor experiencia”.
A ello se suman los técnicos que lideran las sesiones o los psicólogos expertos que elaboran las audioguías de mindfulness y bienestar. “El equipo debe estar altamente capacitado y cualificado para transmitir la información de manera efectiva y aumentando la credibilidad de la marca”, describe Valls. La clave, según el directivo, es ofrecer herramientas. “No sólo mostramos un modelo de vida que se debe seguir, sino que proporcionamos recursos necesarios para que los usuarios puedan cumplirlo”, afirma.
Y, más allá del contenido generado en la propia app, es clave estar en aquellas aplicaciones utilizadas por los usuarios. “Las redes sociales son fundamentales porque buscan influir en los hábitos de vida de su comunidad a través de consejos y recomendaciones, y facilitamos el diálogo de nuestros entrenadores con nuestros usuarios”, añade.
Es algo que ya ofrecen otras apps que hacen del deporte y la socialización online su máxima. Muchas compañías llevan años apostando por ecosistemas de aplicaciones enfocadas a la práctica deportiva y en los que la conectividad y la interacción con el consumidor es vital para aumentar el engagement y las ventas digitales.
